El Casademont Zaragoza continúa con las negociaciones para incorporar un nuevo entrenador tras la salida de Jaume Ponsarnau. Con el serbio Dragan Sakota como serio candidato para hacerse con el banquillo aragonés, la entidad mantiene también abiertas otras opciones por si finalmente no cierra el acuerdo con el preparador balcánico. De momento, es Aleix Durán, que llegó el pasado verano como ayudante de Ponsarnau, quien dirige los entrenamientos del primer equipo acompañado por Sergio Lamúa, que se ha reincorporado esta semana, y Nacho Juan, el otro técnico asistente.
Las dificultades para encontrar un relevo de garantías en el mercado, o directamente la negativa o falta de acuerdo con algunos pretendidos, ha sido una de las razones por las que el club no ha acometido antes el relevo en el banquillo. Buena muestra de ello es que, finalmente, el Casademont ha tenido que despedir a Ponsarnau sin tener un relevo cerrado. Esas complicaciones se repiten ahora, cuando la entidad sigue negociando para cerrar un nuevo entrenador y dar así un giro a la situación del equipo.
Además, la llegada de posibles refuerzos al equipo tendrá que esperar a que el banquillo tenga un nuevo inquilino y pueda tomar parte en las decisiones junto a la dirección deportiva. El principal candidato desde la salida de Ponsarnau este domingo es Dragan Sakota, técnico serbio de 69 años con casi cuarenta años de experiencia en los banquillos de Serbia, Grecia, Italia y Turquía. Lleva sin equipo desde 2020, cuando salió del Estrella Roja, y este sería su debut en la Liga Endesa.
El Casademont busca un técnico que pueda dar un giro a la situación del equipo y mejore el rendimiento del mismo, al margen de los nuevos jugadores que también puedan llegar, figura en la que entiende que encaja Dragan Sakota. El conjunto aragonés cuenta con ocho victorias después de 23 partidos jugados y bordea peligrosamente los puestos de descenso en la Liga ACB. La deriva del equipo, la mala imagen ofrecida en las últimas jornadas y las críticas de la afición en el partido frente al Tenerife fueron el detonante para el despido de Jaume Ponsarnau. Este domingo visita al Valencia y, la semana próxima, al Burgos en un duelo que será clave por la permanencia. Ahí el equipo ya debe ofrecer otra cosa.
