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Casademont Zaragoza

Y lo volvieron a hacer. La crónica del Casademont Zaragoza-Barcelona (85-83)

Los hombres de Fisac doblegan al Barcelona en el Príncipe Felipe, como ya hicieron contra el Real Madrid, gracias a una primera parte que quedará para la historia

Iván Cruz penetra a canasta ante la oposición de Satoransky en la victoria contra el Barcelona.

Iván Cruz penetra a canasta ante la oposición de Satoransky en la victoria contra el Barcelona. / ÁNGEL DE CASTRO

Arturo Pola

Arturo Pola

Primero fue el Real Madrid. Y este sábado ha sido el Barcelona. El Casademont Zaragoza volvió a ejercer de matagigantes y doblegó a los catalanes gracias a una primera parte que tuvo de todo y que perdurará en el imaginario colectivo durante mucho tiempo. Primero una interrupción y luego un huracán de color rojo que permitió a los de Fisac coger rentas superiores a los 20 puntos que acabaron defendiendo más mal que bien tras la esperada reacción de los de Jasikevicius en el segundo acto. No obstante, los zaragozanos obtuvieron una victoria, inesperada y de mucho mérito, que les permite dar un paso de gigante en la pelea por la salvación.

Comenzó mandando en el partido Sant-Roos con cinco puntos consecutivos en un preludio de lo que estaba por venir. No encontraba ninguno de los dos equipos la forma de anotar con facilidad y las canastas llegaban a cuentagotas. En el Barcelona, solo Jan Vesely era capaz de producir algo positivo. Cuando el checo se disponía a lanzar dos tiros libres con 6-4 en el luminoso, llegó la anécdota del día. Un fallo eléctrico en la mesa de los árbitros provocó un desfase entre el tiempo real y el del marcador que obligó a parar el partido durante 45 minutos.

Los jugadores realizaban constantes ruedas de tiro y estiramientos para no quedarse fríos mientras el público, impaciente, aprovechó y adelantó la hora del bocadillo. Y en la reanudación fue el Casademont el que devoró al Barcelona. El juego había vuelto al Príncipe Felipe pero el Barcelona no estaba en la cancha. Solo tenía un problema el conjunto aragonés, un problema que se convirtió en solución. Las dos tempranas faltas de Hlinason hicieron que Mara tuviera que salir apresuradamente. Y su conexión con Sant-Roos disparó a los de Fisac hasta el 19-10 con el que acabó el primer cuarto.

El joven canterano siguió sumando en los primeros compases, ayudado por Jessup, con el cubano siempre supervisando erigiéndose como el mejor de los líderes. El Barcelona seguía sin dar señales de vida y con un triplazo de Sant-Roos el Casademont se fue hasta los doce puntos de renta (32-20). Hlinason cometió su tercera falta y tuvo minutos importantes Nguirane, que en su primera acción sacó un 2+1.

Los aficionados del Príncipe Felipe se frotaban los ojos y se miraban unos a otros atónitos. La incredulidad y el júbilo todavía alcanzaron un nivel más alto cuando Simanic cuajó sus mejores minutos de la temporada y con un triple del serbio y otro de Jessup se llegó hasta el 44-22. Ver para creer, el Casademont doblaba al Barcelona. El 46-24 con el que se llegó al descanso se explicaba viendo las estadísticas. 59 a 8 en valoración para los de Fisac con hasta 5 jugadores de los catalanes con números negativos.

Laprovittola y susto

El rapapolvo de Jasikevicius en el descanso surtió efecto y el Barcelona salió con otra cara tras el paso por vestuarios. Dos triples rápidos de los catalanes amenazaban con poner emoción al duelo pero quizá el único que no había aparecido en la primera parte, Iván Cruz, protagonizó minutos de mucha calidad para que la diferencia alcanzará los 25 puntos. Además, Mara no se acobardó ante las provocaciones de Vesely, levantando al Príncipe Felipe con su garra. Pero el equipo culé era otro y poco a poco, de la mano de un inspirado Laprovittola, fue limando esa renta anotando. 30 puntos anotó el Barcelona en el tercer cuarto (seis más que en los dos anteriores) y a falta de los últimos diez minutos, 15 puntos eran los que todavía conservaba el Casademont (69-54).

Siguió la misma tónica el comienzo del último cuarto, con los catalanes tratando de meterse en el partido intentando correr, pero los de Fisac aguantaban bien el tipo y no daba la sensación de que la victoria peligrara. Aun así, Kalinic se unió a Laprovittola y con sus triples los de Jasikevicius bajaron de la barrera psicológica de los diez puntos.

Pero el tiempo se acababa y ese partido el equipo catalán ya no lo podía ganar, solo lo podía perder el Casademont. Y casi lo hace. Con muy malas decisiones y fallando muchos tiros libres dio vida a un Barcelona que acabó muriendo en la orilla ante el respiro aliviado de la afición del Príncipe Felipe que, pasado el susto, acabó brindando una ovación de gala a sus jugadores a la vez que seguían preguntándose unos a otros si lo que habían visto era real.

Ficha técnica:

Casademont Zaragoza (19+27+23+16): Wright (2), Sant-Roos (21), Yusta (11), Cruz (11), Hlinason (9) -cinco inicial- Jessup (7), Mara (13), Nguirane (2), Simanic (7), Jovic (2) y Flores (-).

Barça (12+12+30+29): Laprovittola (28), Satoransky (7), Abrines (7), Vesely (12), Sanli (-) -cinco inicial- Sergi Martínez (-), Kalinic (15), Tobey (3), Kuric (7), Jokubaitis (4) y Nnaji (-).

Árbitros: Pérez Pérez, Oyón y Cristóbal Sánchez. Excluyeron por personales a Vesely (m.40), Hlinason (m.40) y Abrines (m.40)

Incidencias: partido correspondiente a la jornada 21 de Liga disputado en el pabellón Príncipe Felipe de Zaragoza ante 6.856 espectadores. El encuentro tuvo que ser interrumpido durante 40 minutos cuando se llevaban disputados 5 minutos por un problema con la consola de los videomarcadores. Debutó con el Casademont Zaragoza el canterano Miguel Flores.