La crónica del Casademont femenino-Barça (88-46): victoria por KO

La mejor versión en el mejor momento. El mejor triunfo justo antes de la Copa de la Reina, la gran cita de la temporada. Una victoria por aplastamiento, por KO técnico nada más empezar, con todas las jugadoras sumando y aportando, con rotaciones, sin más lesionadas. Todo le ha salido a pedir de boca al Casademont Zaragoza frente al Barça en un encuentro espectacular que terminó con un contundente 88-46. Son ya 19 victorias en la Liga Femenina Endesa, el cuarto puesto bien amarrado y licencia para soñar con lo que sea.

Era un día para repartir esfuerzos pero también para competir y Carlos Cantero mantuvo su quinteto inicial y el Casademont Zaragoza recuperó su mejor versión de entrada. La de ese equipo imparable, que defiende, corre y anota y deja aturdido a su rival nada más empezar. El equipo aragonés puso intensidad, robó balones y le puso una velocidad endiablada al partido que obligó al Barça a pedir un tiempo muerto con 11-2 en el marcador. No varió el guion con las rotaciones y el Casademont continuó exprimiendo su buena defensa y sus opciones de contragolpe para acabar el primer cuarto con un contundente 20-8.

El segundo parcial continuó siendo un recital defensivo que maniató al Barça. Esta vez era el equipo rival el que sufría para anotar en estático o en cualquier otra circunstancia ante un Casademont muy seguro de sí mismo, como en sus mejores momentos de esta magnífica temporada. El equipo de Carlos Cantero aplicó el rodillo sin piedad ante un rival que se quedó sin respuestas y sin puntos, no encontró la manera de anotar ni debajo del aro. Tras 16 minutos de juego el marcador señalaba un elocuente 42-10. Al descanso, 46-18.

La diferencia no cambió el guion en la segunda parte. Seguras en el rebote y con una férrea defensa, las jugadoras aragonesas comenzaron el tercer cuarto con un parcial de 9-0 que hundía un poco más a su rival (55-18). El Barça se puso en zona pero el Casademont tenía todas las llaves, por fuera con los triples de Fiebich y de una inconmensurable Carmen Grande, y por dentro con una Gatling muy enchufada. El partido ya estaba resuelto pero el pequeño parón ofensivo de las locales y una antideportiva a Tate permitieron al Barça coger un poco de aire y ganar el cuarto (62-36).

El Casademont rompió su sequía temporal con tres triples, dos de Fiebich y uno increíble a tablero de Mariona, y un parcial de 13-2 en los primeros cinco minutos. Ya con las revoluciones rebajadas, empezando a guardar efectivos para el jueves, el equipo aragonés mantuvo el ritmo a base de triples para volver a disparar la ventaja (80-41) y acabar el partido en alto, con el público coreando y disfrutando hasta el último minuto. Con siete triples en el último cuarto cerró su exhibición el Casademont Zaragoza, que casi dobló a su rival en el marcador (88-46).

El público terminó en pie aplaudiendo a sus jugadoras un buen rato en otro ejemplo de comunión perfecta. Ahora sí, toda la atención, toda la ilusión, todos los sueños están puestos en la Copa de la Reina y ese duelo de cuartos frente al Araski del jueves.