Más lesiones que nunca en el Casademont Zaragoza

Al Casademont Zaragoza le ha mirado un tuerto esta temporada. O dos, porque el conjunto aragonés está batiendo su propio récord de contratiempos cuando solo ha transcurrido la mitad de la campaña. La lesión de Rati Andronikashvili, que puede tenerle un mes o mes y medio de baja, es la séptima dolencia importante, de las que hacen perderse varios partidos, a un jugador de la primera plantilla.

El primero fue Simanic, que perdió un riñón tras un golpe en el Mundial en verano y todavía no ha vuelto a jugar. Después Emegano sufrió un golpe en la rodilla en la pretemporada y una fascitis ya con el curso empezado que le hicieron ser baja y abandonar finalmente el equipo. Bell-Haynes se perdió una jornada y jugó mermado unas cuantas por un problema en el hombro. A finales de noviembre, Yusta y Sulejmanovic sufrieron un esguince de tobillo y el bosnio enganchó con un golpe en la rodilla. Cuando ambos han podido volver han caído otros dos, Smith por un golpe en el cuádriceps durante un entrenamiento y Andronikashvili por una distensión en la rodilla.

Siete lesiones en solo medio año que ya superan las seis de la, hasta ahora, temporada más accidentada del equipo, la 2017-18. Ese año De Jong tuvo varias lesiones a lo largo del curso, McCalebb estuvo un mes fuera, cayó Triguero, luego Varnado, Álex Suárez y Dragovic. Gary Neal, el héroe de aquel curso, tuvo problemas durante toda la campaña ya que apenas podía entrenarse. Diez fichajes en verano, seis durante la temporada y 21 jugadores utilizados en total marcan, de momento, el récord del club.

Esta campaña, que ya había empezado con una revolución casi total en la plantilla con siete fichajes, son también seis los fichajes realizados una vez comenzada la competición, más el ascenso de Álex Moreno, para cubrir las cinco salidas que se han producido (sin contar a Meindl y Morgan): Jovic, Javi García, Emegano, Okafor y Cinciarini. Ya van 19 jugadores utilizados en la Liga Endesa, incluyendo también a los vinculados Traoré y Minzer, ambos debutantes este curso.

También especialmente accidentadas fueron las campañas 2021-22, que marcó el récord de fichajes con la temporada empezada, y 2020-21. Después de un verano tranquilo en el mercado, con solo tres llegadas y una de ellas la recuperación de Jaime Fernández, los problemas de lesiones y de rendimiento llevaron a la entidad a hacer cinco fichajes a lo largo del curso y a utilizar a un total de 20 jugadores en la 20-21, mientras que en la 21-22 hubo ocho fichajes durante el año, la cifra más elevada hasta el momento, aunque el Casademont pretende, al menos, igualarla este curso.

Esa temporada se asemeja en algo a la actual porque ya en pretemporada el equipo sufrió dos contratiempos importantes. Justo antes de comenzar la competición perdió por lesión a dos de los que iban a ser sus pilares básicos, Omar Cook y Santi Yusta. Llegaron Waczynski y Sipahi y un mes después cayó McLean con un esguince de grado 3 que supuso su salida y llegó Deon Thompson. Se marchó Sipahi y le sustituyó Jordan Bone y entonces se lesionó Okoye, que ya no volvió a jugar. El club fichó a Kilpatrick, salió Ramón Vilá y la entidad recuperó a Jaime Fernández, que acabó lesionándose. Antes de terminar todavía llegaron Mekowulu y Ferrari para salvar al equipo. Siete fichajes en verano y ocho durante la temporada.

La temporada pasada fue más tranquila en ese sentido, porque solo hubo dos lesiones graves, las de Radoncic por una fractura en el metacarpo y la de Mekowulu con una fractura en el escafoides de la muñeca derecha. En la 2018-19 también hubo un número importante de problemas porque Seibutis fue baja toda la temporada por sus problemas de espalda, Fran Vázquez sufrió varios contratiempos y estuvo un mes de baja de abril a mayo, McCalebb también acumuló diferentes problemas en los entrenamientos y Barreiro sufrió una rotura fibrilar.