Entrevista con Ainhoa Gervasini: "Sentí que no encajaba en los gustos ni en el proyecto"

-P:¿Cómo está?¿Cómo ha vivido estos días tan locos? 

-R: Ahora mejor. Ha sido una semana dura, pero estoy ya ilusionada con la oportunidad que me han dado aquí en La Seu y con muchas ganas de este nuevo comienzo. Sí es cierto que salir de un club como el Casademont con todo lo que personalmente me han aportado no es fácil. Es duro despedirse.

-¿La decisión de su salida ha sido tomada por el club, por usted o ha sido pactada? 

-Mi situación no era la ideal. Con la incorporación de Helena Oma cuando se recupere, la estructura del equipo está pensada para 13 jugadoras y yo iba a tener todavía un rol más secundario. El club me comunica después de la Supercopa la decisión que había tomado y al final ambas partes pactamos la salida. Se decidió no apostar y no creer en mí y lo mejor era tomar caminos separados para no alargar la situación en la que me encontraba.

"La relación con Cantero me la guardo para mi persona y para mi grupo más personal. No tengo ningún tipo de comentarios que hacer de ese tema"

-¿Le sorprendió la noticia o contemplaba esa posibilidad?

-Me lo podía esperar, aunque no ha sido algo que me hayan ido dejando caer. Tú ves lo que estás jugando, aunque cada día seguía peleando por hacerme un hueco. Yo había firmado un contrato y mi compromiso era acabar la temporada y no es lo ideal salir en la semana de la primera jornada de Liga.

-¿Considera que el club ha sido justo con usted? 

-Cada uno tiene su opinión y su perspectiva y es difícil entrar a valorar lo que es justo y lo que no. Cada entidad tiene sus gustos. Lo que puedo decir es que sentí que no encajaba en el proyecto y no ha sido porque no te lo hayas ganado ni porque no puedas aportar. No niego que me hubiera gustado tener muchas más oportunidades para demostrar que podía ser mucho más importante en el equipo.

-En su carta de despedida se acordó de mucha gente a la que le dio las gracias, pero no nombró a Carlos Cantero ni a su cuerpo técnico. ¿Fue un olvido? 

-No. Simplemente quería agradecer a la gente que aportó en mi estancia en Zaragoza y ya está. No había ningún motivo en particular. 

-¿Cómo ha sido su relación con el técnico? 

-Eso prefiero dejarlo para mi persona y para mi grupo más personal. No tengo ningún tipo de comentarios que hacer acerca de este tema.

-¿Ha sentido que ha perdido su confianza? La temporada pasada contó mucho más para él. 

-No, vuelvo a lo de antes. Sientes que no encajas en determinados gustos ni en el proyecto.

"Jugar con Mariona fue una de las razones por las que fiché por el Casademont. He aprendido mucho, ha sido un honor. Fiebich es una todoterreno, no tiene techo"

-La decisión del club de prescindir de usted pareció no gustar demasiado entre la ‘Marea Roja’. 

-Estoy feliz y agradecida de haber tenido tanto comentario positivo. No me sorprendió porque desde el principio me he sentido muy querida por la afición. Su cariño y su apoyo es una de las cosas que más voy a echar de menos. La gente ha valorado que me he dejado siempre todo en la pista. Su rasmia me la quedo para mí.

-¿Cómo valora su estancia en el Casademont?

-Muy positiva. He crecido tanto en lo baloncestístico, como sobre todo a nivel mental. Me ha endurecido. Estoy muy agradecida al Casademont por la oportunidad que me dio como jugadora de proyección. Quería saber cuál era mi nivel y si estaba capacitada para el reto. Ha sido un año duro, pero no me arrepiento. He aprendido mucho y soy ahora mucho mejor jugadora.

-Ha compartido vestuario con compañeras de mucho nivel. Mariona, Fiebich, Vega... 

-Siempre he dicho que una de las cosas por las que fiché por Casademont era para jugar con Mariona Ortiz, me ha enseñado mucho y ha sido un honor. A Leo Fiebich la conozco desde hace mucho porque somos de la misma generación. Sabía que iba a llegar lejos, es una todoterreno que te aporta en todas las facetas del juego. Defenderla era un reto cada día. No tiene techo. Es muy humilde, muy trabajadora y me alegro de todo lo bueno que le está pasando. Vega Gimeno es una persona muy dominante. Es insustituible, pero Mariona, de otra manera, ha dado un paso adelante en el rol de capitana. 

-¿Cómo ve al Casademont este año? ¿Le augura un buen año? 

Es un equipo muy diferente al del año pasado, aunque que no esté Leo se nota mucho. Creo que irá de menos a más. Es un grupo muy polivalente y muy trabajable. Tiene muchas capacidades y mucho potencial. Seguro que tendrán grandes resultados.

"Quién sabe si volveré algún día. Veremos dónde está el Casademont como club y dónde estoy yo como jugadora"

-¿Cómo se gestó su fichaje por Cadí La Seu? 

-También rápido. Fue una decisión fácil. Al entrenador lo conozco desde hace años y me dijo que mi perfil le encajaba a la perfección. Las sensaciones son muy buenas.

-Este año volverá al Príncipe Felipe como rival. 

-Lo he pensado pero todavía no me imagino cómo será ese día. Lo cogeré con ganas y estoy segura de que la gente me va a mostrar el mismo cariño de siempre. Será especial y emocionante. En el Príncipe Felipe he vivido, con diferencia, los mejores ambientes de baloncesto de mi carrera.

-Es usted joven (24 años). ¿Se imagina volviendo en algún momento al Casademont Zaragoza o cierra esa puerta?

-Quién sabe. Para el club y para la ciudad no tengo palabras más que de agradecimiento por la oportunidad que me dieron cuando no tenía demasiada experiencia. Estoy muy centrada ahora en mi presente, pero nadie sabe lo que va a deparar el futuro. En unos años veremos dónde está el Casademont como club y dónde estoy yo como jugadora.