El agujero sin Dubljevic comienza a pasar factura en el Casademont Zaragoza

La buena racha del Casademont Zaragoza, que acumulaba cuatro victorias consecutivas, se truncó de manera abrupta en Grecia con una dolorosa derrota que ha provocado que vuelvan algunos de los fantasmas que parecían olvidados. El primero, y el más obvio, el nuevo descalabro defensivo del equipo dirigido por Porfirio Fisac, que permitió que un Maroussi en crisis y con una rotación limitada le endosara nada más y nada menos que 104 puntos.

La segunda, también evidente, es el que el club aragonés debe darse prisa para sustituir a Bojan Dubljevic, que estará fuera al menos tres meses. El sobresaliente encuentro que cuajó el Casademont ante el Andorra escondió en parte una imperiosa necesidad que en tierras helenas quedó más que patente.

En el Principado, Bango se multiplicó por dos e hizo olvidar la baja del montenegrino, pero esa es una situación que no se puede mantener en el tiempo. El angoleño volvió a ser el mejor ante el Maroussi, pero jugó muchos menos minutos de los que su equipo lo hubiera necesitado. Ya fuera por decisión estrictamente técnica o una distribución de minutos pensada para no quemar al jugador antes del importante duelo ante el Barcelona en el Felipe de este domingo, hubo muchos momentos importantes del partido europeo en el que el Casademont tuvo que sobrevivir sin una referencia clara en la pintura.

Bango destaca pese a todo. Las notas de los jugadores del Casademont Zaragoza en Maroussi

En esos tramos, el pívot improvisado tuvo que ser Sulejmanovic en una rotación interior en la que, sin Bango, el bosnio con Mencía o la ayuda de Jaime Fernández se queda coja, por decirlo finamente. El agujero por dentro es profundo y el club, consciente de ello, se afana por taparlo cuanto antes, aunque no está siendo tarea sencilla.

El mercado a estas alturas de temporada es el que es y las opciones, tremendamente limitadas. "Quiero el mejor jugador que me puedan traer para sustituir a Dubljevic", afirmó tajante un Fisac que sigue esperando. Y en esas está el conjunto aragonés, buceando en el mercado para ver qué es capaz de encontrar.

Y mientras tanto la temporada sigue, aunque la llegada de la Navidad hace que frene su ritmo, algo que le da oxígeno a un equipo que no volverá a jugar en Europa, donde el miércoles se complicó mucho su futuro, hasta 2025. En la ACB, a los hombres de Fisac les quedan tres partidos antes de finalizar el año (Barcelona, Gran Canaria y Girona). En esos complicados duelos el Casademont se juega buena parte de sus opciones para estar en la Copa del Rey, un objetivo que se antoja complicado si no llega pronto el ansiado sustituto para Dubljevic.