La crónica del Casademot-Valencia Basket: los Globetrotters se pintan la cara de naranja y ponen la del Casademont colorada

Bacanal en el Felipe. Pero no de los de casa. El Valencia Basket celebró el carnaval en Zaragoza y se disfrazó de los Harlem Globertrotters para firmar una orgía para el recuerdo ante un Casademont primero perdido y sin defensa y luego desganado, algo que no le perdonó su afición (71-115). Porque contra los de Pedro Martínez por supuesto que se puede perder, pero de ninguna manera de la forma de la que lo hizo el equipo dirigido por Porfirio Fisac. Porque el Valencia estuvo imparable y con ese nivel de juego y acierto iba a ser tremendamente complicado plantarle cara, pero los aragoneses les ayudaron en todo lo que estaba en sus manos. El Casademont nunca había recibido tantos puntos, sin prórroga, en su hogar.

El partido no engañó en ningún momento. Todavía seguía entrando gente cuando el Valencia Basket, en un abrir y cerrar de ojos, ya ganaba 4-13 en poco más de tres minutos. En el Casademont, sorprendentemente, todo giraba en ataque en torno a Nate Watson, que fue titular. El nuevo pívot de los aragoneses dejó alguna acción interesante que combinó con algunas precipitaciones.

Spissu, lo más salvable del bochorno. El uno a uno en el Casademont Zaragoza-Valencia Basket

Mientras tanto, el Valencia Basket seguía mandando gracias a ataques vertiginosos que culminaban con tremenda facilidad. En los de Fisac, solo Bell-Haynes y el debutante Timsa encontraban la manera de mantener al Casademont por debajo de los 10 puntos de desventaja cuando se llegó al final del primer cuarto (20-29).

Tenía que ajustar en defensa el conjunto zaragozano para agarrarse al choque. Pues todo lo contrario. Eso sí, más mérito del Valencia Basket que demérito del Casademont. Porque lo del segundo cuarto fue una bacanal de las pocas veces vista. Los de Pedro Martínez parecían poseídos por ese espíritu de los Globetrotters. Robos, canastas a la carrera, triples…todo lo que tocaban lo convertían en oro. Anotaba también a buen ritmo el Casademont, pero ni de cerca a la marcha que lo hacía el Valencia. 

El capitán Yusta intentó salir al rescate, pero entre Badio, López-Aróstegui, Montero y Ojeleye perpetraron una actuación histórica. El 9 de 13 en triples era solo la punta de lanza de una primera parte orgásmica de los valencianos. El 40-63 con el que se alcanzó el descanso dejaba, salvo milagro, el partido visto para sentencia. 

Si la prioridad de Fisac era Europa, quizá era el momento de pensar en el Cholet. Eso pareció hacer el Casademont, que vio cómo la vida seguía igual tras el paso por vestuarios, con el Valencia Basket en modo exhibición. Bajaron los brazos, claramente, los aragoneses y el partido se convirtió en un correcalles mientras la ventaja seguía aumentando.

Perdía de 30 el Casademont y mucha gente abandonó el Felipe para ver si en La Romareda había mejores noticias. Quedaban 10 minutos en el pabellón que solo sirvieron para que el Valencia Basket intentara batir récords históricos. El equipo de Fisac, hundido y sin alma, parecía contribuir a ello. La afición del Felipe castigó, merecidamente, esa actitud con pitos en varias ocasiones y con una sonora bronca cuando el partido, por suerte, había acabado. Borrón y cuenta nueva deberá hacer el Casademont para desquitarse de lo de este sábado y compensar a sus fieles de lo que tuvieron que soportar en su hogar. El Cholet espera en el partido más importante de lo que llevamos de curso.

Ficha técnica

71 - Casademont Zaragoza (20+20+19+12): Spissu (12), Slaughter (11), Miguel González (5), Sulejmanovic (13), Watson (8) -cinco inicial- Bell-Haynes (6), Yusta (8), Mencía (2), Jaime Fernández (-), Dubljevic (1), Moreno (-) y Dimsa (5).

115 - Valencia Basket (29+34+26+26): Jones (13), Badio (10), Sestina (15), Ojeleye (17), Costello (6) -cinco inicial- Puerto (5), Reuvers (14), Pradilla (10), López-Aróstegui (10) y Montero (15).

Árbitros: Jordi Aliaga, Jorge Martínez y Cristóbal Sánchez Cutillas. Sin exclusiones.

Incidencias: partido correspondiente a la jornada 21 de Liga disputado en el pabellón Príncipe Felipe de Zaragoza ante 7447 espectadores