La Policía Nacional ha detenido a dos jóvenes, de 18 y 20 años respectivamente, como presuntos autores de más de 100 robos con fuerza en trasteros de Zaragoza en solamente diez días. Además, la Policía Nacional también ha apresado a la madre que se encargaba de guardar en su domicilio el material recaudado por los otros dos detenidos, por tenencia ilícita de armas.

La detención tuvo lugar en la madrugada del martes 19 de octubre después de que una patrulla policial en servicio observasen en mitad de la calle de Las Armas a dos personas que transportaban con un carretillo una caja muy grande. Tras percatarse de la presencia policial, uno de ellos decidió emprender la huida siendo interceptado por uno de los agentes, que identificaron a ambos.

Los actuantes decidieron comprobar el contenido de la caja y se toparon con un armero de grandes dimensiones del cual no se conocía la procedencia tras las declaraciones dudosas de los jóvenes. En previsión de que el objeto procediese de algún tipo de robo, los agentes lo trasladaron a dependencias policiales para intentar localizar a su verdadero propietario.

Pocos minutos más tarde, este mismo indicativo policial se enteró a través del servicio de telecomunicaciones que se acababa de producir un robo con fuerza en unos trasteros localizados en la avenida Puerta Sancho de La Almozara del que se había sustraído un armero de grandes dimensiones.

Por tal motivo, la Policía Nacional se desplazó hasta el domicilio de uno de los jóvenes identificados en la calle Las Armas, localizándolo nuevamente en la calle y, finalmente, procedió a su detención. Después de una investigación, los agentes descubrieron que habría un segundo autor del robo en los trasteros que fue detenido horas más tarde.

Desplazamientos en taxi

Además, el primer detenido manifestó a los actuantes que en los robos que realizaron durante madrugada del día 19, llegaron a trasladar los efectos sustraídos en taxi hasta el domicilio y el trastero de la madre de su compañero, por lo que se procedió a solicitar un mandamiento de entrada y registro en la citada vivienda al fin de comprobar y recuperar los objetos obtenidos de forma ilícita que allí se pudieran encontrar.

En dicho registro se intervinieron multitud de efectos cuya procedencia la madre del detenido no pudo justificar de forma alguna, como bicicletas, patinetes eléctricos, ordenadores, televisiones, cajas de herramientas y otros diversos objetos.

Esto no fue todo ya que la policía le intervino a esta mujer una escopeta recortada y varias cajas con munición, que ella misma entregó voluntariamente a los agentes, explicando que la había comprado por miedo a que le pudiera pasar algo. Por tal motivo, los actuantes procedieron a su detención por un delito de tenencia ilícita de armas.

Una vez reseñados todos los efectos encontrados en el registro, los investigadores comprobaron que la mayoría de ellos habían sido denunciados por sus propietarios días antes, manifestando que habían sustraídos de  sus trasteros forzándolos previamente. A ambos detenidos se les imputaron más de 100 robos con fuerza entre el 10 y el 19 de octubre en distintos trasteros de la ciudad, principalmente en el barrio de La Almozara.

Horas después los tres detenidos fueron a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia, quien tras oírlos en declaración decretó la puesta en libertad del joven de 18 años y de la mujer, y el inmediato ingreso en prisión del varón de 20 años.