Un vecino del zaragozano barrio de Casablanca vio una oportunidad en el chalet abandonado contiguo al que reside. En concreto decidió emplearlo para el cultivo de marihuana. Pero la Policía Nacional lo ha descubierto, interviniendo 80 kilos de cannabis y deteniendo a tres jóvenes por explotar dicha plantación a la que accedía por un butrón entre las dos casas.

La investigación comenzó un mes atrás, el pasado 21 de octubre, cuando agentes de la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Jefatura Superior de Policía de Aragón hallaron cerca de ochenta kilos de marihuana en el interior de un chalet adosado en el barrio de Casablanca, haciendo entrega de lo incautado en la Comisaría de San José de la Policía Nacional que asumió las pesquisas.

En el momento de la intervención de la sustancia estupefaciente no se practicaron detenciones ya que el inmueble en el que fueron localizadas las plantas se encontraba vacío y sin síntomas de habitabilidad, comenzando así con las gestiones para identificar a los responsables del delito. Tras una ardua investigación, miembros del Grupo de Policía Judicial de San José dieron con el principal sospechoso, que resultó ser el vecino colindante al adosado donde se localizaron las plantas de marihuana, quien había realizado un butrón entre ambas casas para acceder desde su residencia.

La detención de este joven, de 23 años de edad, se produjo el viernes 19 de noviembre, quedando en libertad tras prestar declaración a la espera de ser citado por el juzgado. Cuenta con casi una veintena de antecedentes policiales y residía en la casa como okupa. El cauce de las pesquisas llevó a la detención de otras dos personas, también okupas de la misma zona. Estas detenciones se produjeron a primera hora de la tarde del lunes y tras ser oídos en declaración quedaron en libertad, asistidos por la abogada Olga Oseira. Cuentan con numerosos antecedentes, sumando entre ambos casi medio centenar de reseñas.