Aragón, y en concreto el Pirineo por ser frontera con Francia, es uno de los puntos marcados en la conocida como Ruta del hachís proveniente de Marruecos que desembarca en la costa gaditana y cuyo destino es Europa. Día sí y día también la Guardia Civil consigue interceptar narcolanchas con esta droga a bordo, pero es tal el volumen que muchas llegan a destino. Por el camino se quedaron nada menos que 570 kilos en un barranco oscense por el que se precipitó un vehículo que los transportaba. El joven francés que iba al volante del turismo de gran cilindrada fue detenido e ingresó en prisión provisional nada más recuperarse de las heridas que sufrió. 

La persecución y posterior siniestro en la zona de Villanúa por parte de una patrulla de puesto de Canfranc Estación que sospechó del turismo ocurrió n la noche del 21 al 22 de junio, según informó ayer la Comandancia de la Guardia Civil de Huesca. Los agentes avistaron este vehículo de la marca Audi y con matrícula alemana en el paraje conocido como camino viejo de Orbil cuando circulaba a gran velocidad y cuyo conductor, al observar a los agentes, retrocedió en dirección a Castiello de Jaca.

Cuando los agentes se aproximaron al vehículo sospechoso y encendieron las luces prioritarias con el fin de darle el alto, el conductor emprendió la huida a gran velocidad hasta que durante la marcha por un campo colisionó con una valla y cayó por un barranco. Cuando la patrulla accedió hasta el lugar el conductor ya había abandonado el habitáculo.

El coche era un turismo de alta gama, habitual entre los que se dedican al transporte de droga entre España y el norte de Europa, según el instituto armado, por lo que los agentes habían solicitado patrullas de refuerzo con las que procedieron a la búsqueda del fugado.

Paquetes con 750 kilos de hachís. GUARDIA CIVIL

Durante la inspección del vehículo se localizaron numerosos fardos envueltos en plástico marrón de diferentes tamaños de los que se hizo cargo el Equipo de Policía Judicial de Jaca y que contenían 570 kilos de hachís.

El conductor, un joven de 26 años y nacionalidad francesa, fue localizado a las 07.50 horas de la mañana siguiente por agentes del Destacamento de Tráfico de Jaca. Había conseguido salir del turismo e intentar fugarse, pero su mal estado físico con heridas, cortes y contusiones le impidieron ir muy lejos. Ante las evidencias de que era el conductor del coche que la jornada anterior había protagonizado una persecución y posteriormente haber tenido un accidente fue detenido como supuesto autor de un delito contra la salud pública, por tráfico de drogas. El joven tuvo que ser trasladado a dependencias hospitalarias de Jaca por personal de la Guardia Civil y quedó ingresado en el hospital en observación durante dos días, bajo custodia, hasta poder ponerlo a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Jaca. En diciembre del pasado año, en Sabiñánigo, la Guardia Civil intervino ocho toneladas y detuvo a seis personas.