Agentes de la Jefatura Superior de Policía de Aragón detuvieron a un hombre de 32 años de edad como presunto responsable de un delito de odio y otro de amenazas.

Los hechos ocurrieron el pasado día 26 de julio, sobre las 18:00 horas, en la calle Delicias. En ese momento, la responsable de un establecimiento hostelero alertó al CIMACC 091 de que un hombre estaba increpando y amenazando a una mujer y a varios clientes.

Una patrulla de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana que se encontraba muy próxima se acercó al lugar, pero el hombre ya se había ido. La descripción detallada que facilitó la víctima fue clave para localizarlo en poco tiempo en la calle Berenguer de Bardají.

Según la dueña del local, este hombre llevaba varios días acudiendo al lugar exclusivamente para amenazar de muerte e increpar con insultos xenófobos, tanto a ella como a su familia, incluso intentado agredirla sin llegar a consumarse. Algunos de sus clientes también sufrieron amenazas e insultos constantes.

Una vez identificado, los agentes pudieron comprobar que este hombre tenía varios antecedentes policiales por amenazas y lesiones, siendo detenido en ese mismo instante como presunto autor de un delito de amenazas graves y delito de odio. Este pasado miércoles pasó a disposición judicial, quedando en libertad con cargos.

La Policía Nacional recuerda que un delito de odio es cualquier acto criminal, motivado por el sesgo o el prejuicio hacia un grupo particular de personas por motivos racistas, antisemitas u otra clase de discriminación referente a la ideología, religión o creencias de la víctima, la etnia, raza o nación a la que pertenezca, su sexo, orientación o identidad sexual, razones de género, la enfermedad que padezca o su discapacidad.