SUCESOS EN ARAGÓN

Detenido un conductor por fugarse a 180 km/h desde Zaragoza hasta Alagón y embestir contra los vehículos policiales

Los perros detectaron sustancias estupefacientes en el interior del salpicadero | Al llegar al peaje de Alagón, embistió contra la valla, la rompió y continuó su huida

La persecución policial se inició en Vía Hispanidad, a la altura de Los Enlaces, en Zaragoza.

La persecución policial se inició en Vía Hispanidad, a la altura de Los Enlaces, en Zaragoza. / MIGUEL ÁNGEL GRACIA

Circulaba a gran velocidad mientras cambiaba bruscamente de carril en Vía Hispanidad, a la altura de Los Enlaces, en Zaragoza. Esta conducción temeraria no pasó desapercibida para los efectivos de la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Jefatura Superior de Policía en Aragón que, en ese momento, activaron las señales luminosas y acústicas para tratar de darle alcance.

Sin embargo, este conductor hizo caso omiso de las indicaciones policiales, iniciándose así una persecución que finalizó en el Polígono La Ciruela de Alagón con la detención de un varón de 43 años y origen magrebí identificado bajo las iniciales de S. B.. Incluso antes de ser esposado atacó con agresividad a los agentes. Ahora se le imputan hasta cuatro delitos por atentado, tentativa de homicidio, daños y contra la seguridad del tráfico.

La persecución se remonta a última hora de la tarde de este jueves, a eso de las 20.00 horas. El vehículo fugado llegó a alcanzar los 180km/h mientras se dirigía hacia la AP-68 y, durante su huida, llegó a embestir al vehículo policial en varias ocasiones. De hecho, trató de sacarlo de la vía.

Todo hacía indicar que la persecución podría finalizar en el peaje de Alagón, pero este conductor no se detuvo ante la valla y, tras embestir contra ella, la rompió y continuó su fuga en el Polígono La Ciruela. Allí volvió a embestir contra los vehículos policiales que le perseguían, aunque finalmente fue interceptado. No obstante, al salir de su vehículo, agredió a los agentes antes de ser reducido y detenido. Durante la inspección del vehículo, los perros detectaron sustancias estupefacientes en el interior del salpicadero.

Entre las lesiones que sufrieron los agentes, destaca la fractura del quinto metatarsiano de uno de ellos.