SUCESOS EN ARAGÓN

Cae una banda que robó más de 7.000 euros en lavanderías de todo Aragón

A los tres detenidos se les imputan nueve delitos de robo con fuerza

Uno de los miembros de esta banda, en el momento de atracar una de las lavanderías.

Uno de los miembros de esta banda, en el momento de atracar una de las lavanderías. / GUARDIA CIVIL

La Guardia Civil detuvo ayer a tres jóvenes que protagonizaron un tour turístico a lo largo de toda la comunidad de Aragón e incluso por La Rioja atracando lavanderías y llevándose casi 8.000 euros de las máquinas de recaudación. Los detenidos, identificados bajo las iniciales de M. A. T. R.; O. G. G., y J. A. M., de 37, 38 y 25 años de edad, respectivamente, pasaron este jueves a disposición judicial ante el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Ejea de los Caballeros, que decretó su puesta en libertad provisional tras escucharles en declaración judicial asistidos por la letrada Marina Ons. A ellos se les imputan nueve delitos de robo con fuerza en las cosas y un delito de pertenencia a organización criminal tras atracar desde noviembre hasta enero lavanderías en María de Hueva (4.000 euros), Fuentes de Ebro (800), Villanueva de Gállego (200), Calahorra (800), Valderrobres (400), Biescas (500), Canfranc (250), Sabiñánigo y Ejea de los Caballeros (500).

La investigación se precipitó a principios de año, cuando estos delincuentes forzaron la dispensadora de cambio de una lavandería de Ejea con un destornillador y se llevaron 500 euros. Poco después, una patrulla de la Guardia Civil paró el coche en el que habían huido en la localidad navarra de Andosilla y allí localizaron numerosas monedas de un euro entre sus pertenencias y vestimentas. Tras realizar las gestiones pertinentes y comprobar que los sospechosos habían protagonizado todos los atracos citados anteriormente, la Guardia Civil de Ejea les detuvo ayer.

Estos tres individuos se distribuían las funciones para efectuar los robos; unos hechos que se cometieron a plena luz del día, de una manera muy rápida, en el que se aprovecha, el tiempo que transcurría entre lavado y lavado, no habiendo nadie en el interior del establecimiento: mientras uno de los componentes de este grupo esperaba en un vehículo fuera del local, los otros dos accedían al establecimiento. Ya en el interior, uno de ellos vigilaba, mientras el autor material procedía a forzar con un destornillador la máquina de la recaudación y obtener el dinero que se hallaba en el interior. Los sospechosos cometían los robos con el rostro cubierto para evitar que se les reconociese.