La quema de contenedores en Zaragoza suele sobresaltar con cierta frecuencia a los vecinos de algún barrio cuando se producen hechos como los ocurridos en la noche de este viernes en el barrio Oliver. En este caso, la Policía dio con el autor de los hechos, gracias a la rápida intervención de los agentes alertados por los propios vecinos, y el responsable, un joven de 18 años, acabó siendo detenido cuando se encontraba en otra calle del distrito.
Aunque fue su comportamiento anómalo lo que le delató, ya que una patrulla que se encontraba por la zona se topó con él mientras emprendía la huida y decidió interceptarle. Al final, su identificación coincidía con las pistas aportadas por los testigos de lo ocurrido.
Los hechos se producían en torno a las 22.00 horas, en la Ronda Ibón de Plan de este barrio zaragozano, a la altura del número 28. El pirómano prendió fuego a uno de los contenedores presentes en la vía pública, que rápidamente ardió generando la alarma entre los residentes de la zona.
En el momento de prender fuego al depósito de basura, el autor, un joven de nacionalidad española que ha sido identificado como A. G. S. A, huyó del lugar de los hechos rápidamente. Los vecinos alertaron a la Policía, que rápidamente se desplazaron a la zona y emprendieron la búsqueda del pirómano con la descripción aportada por algunos de los testigos presenciales. Pocos minutos después era arrestado en una calle próxima al contenedor calcinado.
Por suerte, en esta ocasión no hubo daños personales ni materiales que lamentar, aunque el susto que provocan este tipo de vandalismo y, por la proximidad de vehículos y viviendas a estos contenedores en la vía pública, estos siempre salgan afectados. En este caso, el bloque de viviendas queda a mucha distancia de la zona donde están ubicados los depósitos y los vehículos estacionados en las inmediaciones no se vieron afectados por el fuego.
Ahora están pendientes de que preste declaración y se investiga si este joven de 18 años pudiera estar relacionado con hechos similares registrados en la ciudad. De momento, con su rápido arresto, tendrá que responder por el enésimo episodio de vandalismo de este tipo registrado en el barrio Oliver.
Un barrio muy castigado este año
No obstante, no es la única quema de contenedores registrada este año en el barrio zaragozano de Oliver. De hecho, el pasado mes de julio eran ocho los depósitos que ardían a las 3.25 horas de la madrugada en dos puntos distintos del distrito: uno de cinco contenedores y otro de tres, no produciéndose daños personales pero sí afectando a seis vehículos. En este caso eran los vecinos de la calle de San Vicente Ferrer, junto al colegio Fernando el Católico, los que recibían sobresaltados este acto vandálico.
De hecho, a estas alturas del año la cifra ya ronda los 150 contenedores quemados, ya que solo hasta julio la cifra ya ascendía a 143, cuya factura para el ayuntamiento por los daños ocasionados y la reposición de depósitos calcinados, ascendía a más de 127.000 euros. De ese total, 37 habían sido quemados solo julio y buena parte de ellos en una oleada de incidentes que se cebaron precisamente con el distrito Oliver-Valdefierro, además de Delicias.