La localidad zaragozana de Rodén volverá a danzar este domingo, 14 de noviembre, en honor a su patrón, San Martín de Tours, tras dos años sin celebrar esta festividad a causa de la pandemia del coronavirus. Durante todo el fin de semana, esta pequeña población perteneciente al municipio de Fuentes de Ebro ha organizado diversos actos, como sucede en otros pueblos de la comunidad aragonesa, que desde el pasado 31 de octubre han recuperado sus fiestas.

En este sentido, una docena de personas participarán en el acto central y "más deseado" de estos días, ha confirmado en declaraciones a Europa Press Encarna Salvador, una de las precursoras del dance en Rodén.

En este baile tradicional, que se realiza desde antes de la Guerra Civil y que solo se ha suspendido con motivo de dicha contienda y del coronavirus, representa de manera teatralizada la lucha entre moros y cristianos, liderados por Mahoma y San Martín de Tours, respectivamente.

El dance de Rodén es "un sentimiento que no se puede explicar", ha sostenido Salvador, para continuar que todo el pueblo se ha implicado "desde siempre" y es la "esencia" de las fiestas. "Ahora no somos más de 20 habitantes", pero descendientes que viven en Fuentes de Ebro u otras partes "siguen viniendo a danzar o a ver la actuación y es una tradición que pasa de padres a hijos", ha puntualizado.

Durante el acto, también se representa la mudanza de 'El Caballero' y otras composiciones, como 'El Pajarillo' y 'El Marirón', además de pasacalles. Todo ello acompañado de las melodías de varias gaitas de boto.

De generación en generación

Los papeles principales del dance de Rodén se han transmitido de generación en generación, ha comentado Encarna Salvador y, por ejemplo, uno de los que lo recuperó, tras la Guerra Civil, Jorge Berges, protagonizaba a un capitán cristiano, a quien sucedió años después su nieto Samuel Molina.

En el caso del capitán turco se da la misma circunstancia. En este papel, fue un "referente" Justo Val, al que siguió su hermano Joaquín, después Jacinto Berges, y retorno a la familia en la persona de Alejandro Val, que lo representa en la actualidad. La figura de mayoral ha pasado, asimismo, desde Pascual Varón a su hija y a su nieta, igual que el rabadán, Joaquín Val, a sus descendientes.

Los participantes, en los años 40, solo portaban sobre sus ropajes de diario una banda con una escarapela. Con el tiempo, se confeccionaron unas vestimentas "más llamativas" y en la actualidad los bailarines y acompañantes visten el traje regional de baturros y se identifican con bandas azules --cristianos-- y granate --moros--.

Encarna Salvador ha destacado el compromiso de todas los vecinos y danzantes que hacen posible esta festividad porque "aunque no sabíamos si podríamos salir a danzar a falta de 15 días, a pesar del frío en los ensayos, los danzantes vienen, se preparan y dan lo mejor de sí mismos" y es que, en Rodén, "hay un arraigo que en otros pueblos más grandes del entorno no sé por qué no se consigue", ha apuntado.

Otros actos

Además del dance a San Martín de Tours, que se representa este domingo, día 14, a las 12.30 horas, la localidad ha organizado otros actos para celebrar sus fiestas patronales, desde los litúrgicos, en honor al santo, hasta actuaciones musicales para todos los públicos.

Este sábado, 13 de noviembre, está programado el Tragachicos, camas elásticas y taller de arcilla, así como un espectáculo de magia y humor y discomóvil, en horario vespertino.

El domingo, habrá recital de jotas a cargo de Estela Alarcón, batucada y una actividad de 'geoscape' para descubrir los misterios que albergan las ruinas del Pueblo Viejo de Rodén.