Durante 20 años la tradicional romería a la Virgen del Plano de Barbastro ha estado marcada por el desplome de algunas estancias de la ermita imposibilitando la celebración de la misa en el interior, desplazándola a los soportales. Este domingo fue un día histórico porque la iglesia se llenó de barbastrenses que acompañaron a su Virgen y al moderador de la Unidad Pastoral de Barbastro, Joaquín Trujillo, que presidió la misa. La referencia más antigua sobre advocación mariana a la Virgen del Plano data de 1595.
Las labores de desescombro y tapiado de puertas, realizadas hace una semana, hicieron posible celebrar la misa y un acto de exaltación a la Virgen, según ha informado María Pilar Toro, priora de la Cofradía de la Virgen del Plano, a la Delegación de Medios de Comunicación Social de la Diócesis de Barbastro-Monzón. A mediodía, se compartió un vino español con los asistentes a la romería, donde colaboraron el ayuntamiento, comercios y empresas. En los días previos, la brigada municipal realizó trabajos de limpieza y mantenimiento en la zona verde circundante.
En los últimos cinco años, de 2018 a 2022, la Junta Directiva ha invertido 5.300 euros para instalar el cercado metálico de 1,5 metros de altura en 142 metros de superficie perimetral para evitar más destrozos en el interior de la ermita, que fue objeto de desmanes por falta de protección.
La inversión reciente, por más de 4.000 euros, ha sido para realizar tareas de desescombro interior y obras accesorias con recursos propios procedentes de cuotas de cofrades y venta de lotería.
Una devoción que se remonta al siglo XVI
La referencia más antigua sobre advocación mariana a la Virgen del Plano data de 1595 cuando el Cabildo iba en procesión, según el historiador Gabriel Sesé. Los bienes de la cofradía desaparecieron con la desamortización y en la ermita actual, de construcción más reciente, se celebraron romerías y fiestas sociales hasta junio de 1997.
En la antigua escalinata, desde el río hasta la ermita, se conservan referencias de comerciantes, empresarios y cofrades de otras épocas que pagaron los 110 peldaños a razón de 25 pesetas cada escalón y cien pesetas los rellanos.
La Cofradía recuperó la romería tras un largo paréntesis donde hubo abandono y deterioro progresivo en iglesia y vivienda, han apuntado las citadas fuentes. La talla de la Virgen del Plano, que se conserva en una capilla de la Catedral de Barbastro, es de imaginería sencilla, con más valor sentimental y afectivo que artístico entre los cofrades.
