Una mujer de 56 años resultó herida este miércoles en Tarazona tras ser atropellada por un coche que circulaba entre las calles Reino de Aragón y Cortes de Aragón. El conductor del vehículo, aparentemente, no vio a la peatón porque quedó cegado por la luz del sol y, al cruzarse con la víctima, le arrancó de cuajo el pie.

El conductor, de 26 años, dio negativo en las pruebas de alcohol y drogas y, según los vecinos conocedores de ese entorno, es habitual que, a determinadas horas, el sol impida la visión a los conductores.

El resultado de este fenómeno, en esta ocasión, fue fatal puesto que el atropello le provocó una fractura abierta en el pie a esta vecina de Tarazona, que fue trasladada a un hospital de Zaragoza. Hasta el lugar del accidente se desplazó la Guardia Civil, si bien fue la Policía Local la que se hizo cargo de la instrucción cuando llegó hasta el punto en el que se produjo el choque