La DGA abre un expediente informativo a la residencia de mayores de Sádaba

El Gobierno de Aragón decidió este miércoles abrir un expediente informativo a la residencia de mayores de Sádaba, tras las quejas formales recibidas de parte de algunos familiares de los 70 ancianos del centro. El motivo, tal y como adelantó este diario, se debe a que los usuarios han pasado la última semana sin calefacción ni agua caliente por un fallo en la caldera el miércoles 4 de diciembre que no fue solventado, provisionalmente, hasta el pasado martes. Una situación que se suma a otras que los familiares aseguran haber vivido en los últimos tiempos, como otro fallo en la caldera en noviembre que provocó una situación similar o los «continuos problemas en el ascensor».

Es por todo ello que este miércoles se han elevado al Departamento de Bienestar Social y Familia, y más concretamente al Servicio de Ordenación de Servicios Sociales, las primeras quejas formales. En ese momento, desde la secretaría general técnica de la consejería que dirige Carmen Susín se procedió a iniciar un expediente informativo, tal y como marca el protocolo para estos casos. Ahora, según explican fuentes del departamento, se le va a requerir toda la información pertinente sobre los últimos sucesos a la empresa gestora, Residencia Villa de Sádaba SL.

La residencia de mayores de Sádaba (Zaragoza) pasa una semana sin calefacción ni agua caliente

Cabe recordar que el centro de la localidad cincovillesa es de titularidad pública, pero de gestión privada. La dirección, liderada por Ángel Subirá, tendrá que aportar los documentos y explicaciones pertinentes a la consejería. Si se subsanan las deficiencias, concluirá el procedimiento. Si persisten, entrarían en juego otra serie de actuaciones. En cualquier caso, no se trata de algo excepcional, sino de un protocolo habitual que se sigue cada vez que llega una queja de este tipo.

Los últimos problemas comenzaron, por tanto, un par de días antes del puente de la Constitución. La caldera comenzó a fallar y, durante el fin de semana, definitivamente dejó de funcionar por completo. Subirá, en declaraciones a este diario, aseguró que había tenido que desplazarse a Pamplona a por calefactores portátiles, aunque los familiares insisten en que hasta el lunes –cinco días después–, no se habilitaron, y tan solo en la planta baja de la residencia y algunas habitaciones, en este último caso, según alegan los afectados, no de forma fija.

Fue el martes cuando unos fontaneros de la zona acudieron y pudieron solventar la avería en la caldera auxiliar de gas, mientras que la principal, de pellet, no llegará, como mínimo, hasta hoy. Mientras, el malestar de los familiares ha incrementado con el paso de los días, asegurando estar «hartos» ante una situación que definen como «recurrente».