"Rocío, tienes un tumor malo. Tienes un cáncer. Hay que operarte cuanto antes". Estas fueron las palabras que Rocío Jurado escuchó de boca del doctor Emilio de Vicente poco antes de ser intervenida durante nueve horas en el Hospital Montepríncipe el pasado 2 de agosto. La intérprete de Como una ola convocó ayer una multitudinaria rueda de prensa en el jardín de su casa madrileña para relatar en primera persona su primer asalto contra un cáncer de páncreas.

El segundo empieza hoy --el día de su 60º cumpleaños-- cuando Jurado viaje al centro Anderson de Houston (Tejas) para someterse a una "cura ligera". "Sólo tomaré una pastillita diaria durante cinco semanas", aseguró.

La artista chipionera confirmó así una noticia que algunos medios de comunicación publicaron días atrás. "Estoy aquí porque hay que decir algo y lo quería decir yo --explicó--. Le prohibí a mi familia que explicase qué me pasaba". Y añadió: "La operación fue un éxito y me quitaron todo el tumor, que estaba en una zona mala y difícil de diagnosticar".

Jurado sólo se apeó de la sonrisa en los momentos más duros. "La noticia fue un mazazo muy grande. No le deseo esta experiencia ni a mi peor enemigo", se sinceró. Pero haciendo acopio de optimismo, Jurado se creció ante la adversidad. "No soy una mujer vencida, sino una mujer con la esperanza renovada. Quiero seguir luchando por la vida y por estar con los míos", explicó. La cantante apeló a la intimidad para justificar su decisión de tratarse en EEUU. "Allí estaré más segura y más tranquila", argumentó.

Los días más duros de la familia Jurado comenzaron cuando la artista empezó a sentir molestias en el estómago. El diagnóstico fue un "cáncer de nivel dos" localizado en el páncreas. "Me provocaba una subida muy grande de bilirrubina en la sangre", dijo. Así que a pesar de sus innumerables alergias, Rocío tuvo que ser intervenida de urgencia.

Más delgada y con total entereza, Jurado envió palabras de aliento a personas que puedan estar pasando por lo mismo que ella: "Tener cáncer no es una vergüenza. Hay que enfrentarse a él porque se puede curar. A mí me han asegurado que pronto volveré a cantar", dijo .