--Crímenes para una exposición combina el mundo de los músicos rusos del XIX con la acción policial contemporánea, ¿cómo se enlazan estas dos etapas?--La acción transcurre en el presente y las víctimas que son anticuarios acaudalados y residentes en distintas partes del mundo, van a ser víctimas de un presunto asesino que está buscando algunas determinadas piezas y que deja pistas en las escenas de los crímenes relacionadas con los músicos rusos del XIX, concretamente con el grupo de Mussorgsky y de Rimski-Korsakov. A través de la novela iremos viendo que esas pistas tienen que ver con una composición antológica que es Cuadros para una exposición, del propio Mussorgsky. A partir de allí, traigo la historia a la actualidad, proporciono a mis policías esa información de los músicos rusos, por qué aspiraban a cambiar por completo la cultura rusa y cuál era su mentalidad porque quizá, a través de ahí, la policía pueda resolver los crímenes.--¿Y resulta difícil lograr unir todo esto en una novela?--Hombre, el lector no va a notar nada. Va a empezar a devorar el libro y no va a soltarlo en ningún momento porque toda la información que se suministra está muy elaborada y muy dosificada. En La mariposa de obsidiana, por ejemplo, cuando yo utilizada los sacrificios aztecas no hablaba de toda la civilización azteca sino simplemente de los significados de determinados sacrificios. Aquí hablaremos de determinados aspectos de la cultura rusa importantes para la trama. Tiene, es cierto, una gran dificultad ensamblarlo todo en la trama pero también es un desafío. No quiero escribir una novela policiaca de las de sota, caballo y rey sino que mis novelas aspiran a tener un peso literario, a perdurar en el tiempo, crear arquetipos, incluir otros móviles, una mayor riqueza psicológica y en la base intelectual y cultural del idioma.--¿Qué aporta Juan Bolea a la novela policiaca?--Trato de renovar este género tan denostado y que su calidad literaria sea reconocida. Por eso trato casos complejos con móviles criminales poco comunes. Si en La mariposa... se abordaba la inmortalidad, aquí el tema principal es la codicia. Si algo se le puede reprochar a Agatha Christie es que precisamente los móviles de los asesinatos que planteaba obedecían a causas excesivamente banales. Yo trabajo más en el psicoanálisis de los personajes, en la historia...--¿Tienen sus novelas una pretensión didáctica más allá de la misma lectura?--Creo que el novelista debe ser didáctico. No es un filósofo ni una persona que esté especulando con el pensamiento sino que debe realmente divulgar incluso su propio pensamiento. En ese sentido el novelista debe ser extremadamente claro y nítido para toda la población. No puedo escribir para los catedráticos de literatura, tengo que escribir para toda la gente que tenga un rato libre y unos euros en el bolsillo y quiera acercarse a un libro entretenido y divertido. Que a través de ese libro quizá se le puede invitar a mayores complejidades o a conocer los apuntes culturales que se incluyen en mi novela, pues ojalá, pero el objetivo fundamental es el entretenimiento.--¿Le resulta más sencillo escribir novelas a partir de un personaje ya creado como Martina de Santo?--Me permite concentrarme más en la trama porque Martina ya tiene una existencia propia ya que está muy definida desde la primera entrega. Y eso hace, por otro lado, que el relato vaya más fluido y la novela sea más funcional.--La mariposa de obsidiana combina el mundo de los músicos rusos del XIX con la acción policial contemporánea, ¿cómo se enlazan estas dos etapas?

Cuadros para una exposición

--¿Y resulta difícil lograr unir todo esto en una novela?

La mariposa de obsidiana

--¿Qué aporta Juan Bolea a la novela policiaca?

La mariposa...

--¿Tienen sus novelas una pretensión didáctica más allá de la misma lectura?

--¿Le resulta más sencillo escribir novelas a partir de un personaje ya creado como Martina de Santo?

-- va a ser llevada al cine, ¿tiene miedo a que la película desvirtúe la novela?--Las películas de ninguna manera puede reflejar el espíritu de las novelas. Son idiomas totalmente distintos, no pienso en imágenes, trabajo con las palabras. Tiene que ser forzosamente una recreación, doy libertad al creador para que haga la escena como le parezca porque saldrá mejor y porque es una obra diferente.