Ya que, como esta película comprende, en estas fechas las personas que nos rodean son especialmente proclives a sacarnos los defectos y a juzgar nuestro modo de vida, se entiende que Brad y Kate, su pareja protagonista, consideren que la unidad familiar es una condena y hayan eliminado las reuniones navideñas de su vida. Sin embargo, y este es el mecanismo dramático central de Como en casa en ningún sitio, este año que se verán obligados a atravesar un largo, tortuoso y humillante vía crucis por las respectivas casas de sus padres y madres divorciados.

NANDO SALVÁ