El director de I´m not there, Todd Haynes, no es el primer cineasta que usa actores diferentes para encarnar al mismo personaje. De hecho, sigue los pasos de Buñuel en Ese oscuro objeto del de-

seo (1977), en la que Carol Bouquet y Ángela Molina interpretaban a la misma mujer, o los de Todd Solondz en Palíndromos, que presentaba a una adolescente llamada Aviva a quien daban vida hasta 8 intérpretes, entre quienes había dos mujeres adultas y un muchacho. La estrategia de Haynes es la más efectiva y la menos caprichosa porque, a diferencia de Solondz, él sí se beneficia de su caracterización multiactoral para representar a Bob Dylan.