El silbo vulnerado, compañía que toma el nombre de una de las obras de Miguel Hernández, rinde homenaje al poeta en el centenario de su muerte (se cumple mañana sábado) con dos propuestas para todos los públicos en la sala Arbolé. Así, Rayo, vieno y ausencia de Miguel Hernández, que se pone en escena los días 30 y 31 a las 21 horas, va destinado a un público más adulto. Se divide en tres partes, Rayo (poesía amorosa); Viento (poesía de guerra) y Ausencia (poesía en prisión). Se trata de un recital cronológico y autobiográfico: del susurro amoroso al grito de guerra y, de ahí, al canto claro de su final. Por otra parte, la compañía acerca la figura del poeta a los niños con El mundo de Miguel, que se representa el día 30, a las 18 y el 31, a las 12 y 18 h.