La discreta boda de Zara Phillips y Mike Tindell

La nieta mayor de Isabel II dio el "sí quiero" al jugador de rugby en una ceremonia íntima.

Se temió que el novio apareciera con la típica falda escocesa (y sus enigmas interiores), pero no fue así. Muy elegante --con un chaqué oscuro, pantalones grises de raya diplomática, chaleco y corbata--, el jugador de rugby Mike Tindall entró ayer a formar parte de la nutrida familia real británica al contraer matrimonio con Zara Phillips, hija de la princesa Ana y nieta de la reina Isabel II. La discreta ceremonia --antítesis del mediático bodorrio de su primo Guillermo que paralizó a media Europa-- tuvo lugar en la modesta pero cautivadora iglesia de Canongate Kirks, situada en la avenida Royal Mile de Edimburgo.

Más de una hora antes de lo previsto, el musculado Tindall se presentó en la parroquia junto con su padrino y compañero de equipo Iain Balshaw y su futuro cuñado Peter Phillips. Su prometida llegó pasadas las 4 de la tarde del brazo de su padre, el capitán Mark Phillips, luciendo un diseño del británico Stewart Parvin en seda de color marfil.

Como manda la tradición británica, la parroquia se llenó de ilustres pamelas, sombreros y tocados, como los que lucieron Isabel II, Camila, la princesa Ana y la joven duquesa Catalina, que estuvieron acompañadas de sus respectivos esposos: Felipe, Carlos, Mark y Guillermo.

DEPORTISTAS También acudieron, entre otros, el príncipe Enrique, que fue quien presentó a Zara a su futuro marido en el Mundial de rugby del 2003, y personalidades del deporte, no en vano ambos son laureados atletas. Zara, de 30 años, amazona profesional, ha sido campeona de Europa y del Mundo en equitación. Precisamente las competiciones de ambos les obligarán a retrasar la luna de miel. Los recién casados se conocieron en Sidney mientras celebraban la victoria en esa ciudad del Mundial de la selección inglesa de rugby, de la que el novio era en ese momento capitán.

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