El pasado lunes los vecinos de Sos del Rey Católico se llevaron una gran sorpresa. Once de las trece sillas escultóricas colocadas en rincones emblemáticos de la población en el 2009, con motivo del 25 aniversario del rodaje de la película La vaquilla, habían sido arrancadas por orden del alcalde, el popular Jesús Iso. Las sillas se inscriben dentro de la conocida como Ruta del Tiempo y cuentan con sendas placas con el nombre del actor al que están dedicadas y una frase entresacada del célebre filme. Una de ellas, que no ha sido arrancada, contiene una escultura sedente del propio García Berlanga y había otras dos dedicadas al guionista y al productor.

El Partido Socialista, que con tres concejales se halla en la oposición, indicó ayer que exigirá explicaciones al alcalde. --Jesús María Iso no ha dicho nada sobre los motivos que le han llevado a hacer esto--, explicó ayer María José Navarro, concejala del PSOE. "Las sillas tenían un valor sentimental y también práctico, pues los numerosos turistas que visitan la localidad las utilizan para descansar mientras contemplan algún rincón típico", agregó.

En una de ellas, dedicada al fallecido actor Alfredo Landa, se había colocado días atrás un ramo de flores en su memoria. Pero el lunes ya no estaba en su sitio y el ramo apareció tirado por el suelo. Ante esta situación, los socialistas han pedido que se convoque un pleno extraordinario y que se repongan de inmediato las esculturas. "Ni los concejales de su propio grupo estaban al corriente de la desaparición de las sillas", comentó María José Navarro. Este diario trató de ponerse en contacto sin éxito con el alcalde de la localidad.

En diciembre del 2009 el Ayuntamiento de Sos del Rey Católico organizó una serie de actos para conmemorar el 25° aniversario del rodaje de La Vaquilla, por lo que se colocaron estas esculturas, realizadas por Luis Fernández, en distintos lugares de la villa, emblemáticos por su aparición en la película.

La inauguración de las esculturas fue todo un acontecimiento, pues varios de los actores regresaron a Sos para recordar el rodaje y volver a encontrarse con los habitantes de la localidad, muchos de los cuales participaron como extras. José Sacristán y Violeta Cela, así como familiares de otros ya difuntos como Agustín González o Adolfo Marsillach, además de los tres hijos de García Berlanga fueron algunos de los presentes.

No era para menos, La vaquilla es una de las películas más brillantes del cine español y la gente de Sos vivió unos días muy especiales durante un rodaje que otorgó gran difusión a la hermosa localidad cincovillesa.