Si el lunes fue el día de encontrar joyitas en el Festival de Málaga con la tierna historia de amor a distancia de 10.000 kilómetros, ayer fue el día de encontrar esa película que uno nunca quisiera haber visto. Por un puñado de besos habla también del amor y las dificultades para mantener a flote una pareja. El problema es que no te crees ni uno solo de sus diálogos. Dirigida por David Menkes, que en el 2009 pulverizó la taquilla con Mentiras y gordas, la cinta provocó escandalosas risas en el pase de prensa. Lo triste es que no era una comedia sino un drama que, basado en una novela de Jordi Sierra i Fabra, narra la historia de amor de dos jóvenes con la enfermedad de por medio.

Rodado en el Madrid más bohemio y cool, el filme resulta tan estilizado que el espectador no consigue creerse nada. Sierra i Fabra apoyó la película y mostró su entusiasmo con el resultado final. En todo caso, el veredicto lo dará el jurado. Y después, el público, ya que la película llega a las salas el 16 de mayo.