El humorista Juako Malavirgen presenta este sábado y domingo  en el Centro Cívico Delicias su última producción, Plastidecor blanco, a las 19.00 horas. Un show de comedia y música en directo dedicada a «los segundones de la historia, a los juegos de mesa y a reírnos de nosotros mismos».

Malavirgen parte del plastidecor blanco para hacer una reflexión, en tono de humor, mayor: «Era la pintura que cuando íbamos al cole nunca se gastaba porque nadie sabíamos usarla ni para qué servía, era la inútil. Partiendo de esa base, lo uso como concepto y hago un recorrido por la historia desde la Edad de Piedra hasta la actualidad buscando otros plastidecores blancos. Aprovecho para hacer reflexiones en tono de humor sobre lo cotidiano pero siempre intentando poner la lupa sobre los fracasados de la historia, los segundones, esa gente que no termina de», cuenta el humorista.

Con su show, Malavirgen pretende un acercamiento a esos «olvidados» para sanar con comedia al público: «Pretendo reivindicar esas cosas que han quedado en el olvido o que parece que con los años se han quedado en la cara B de la historia. A veces lo fácil es condenar al ostracismo al diferente. En el fondo, todos nos hemos sentido o nos vamos a sentir como un plastidecor blanco. Vamos a sentir que no pintamos nada. Intento que la gente haga el ejercicio, por supuesto entre risas, que para eso hemos venido, que empaticen con esos fracasados».

En el video que promociona el espectáculo Plastidecor blanco, Malavirgen canta a los juegos de mesa de los años 80 y 90: «Recuerdo que muchos no teníamos los juegos originales, sino los de Falomir Juegos, que era como la copia barata de la época, imitaciones ilegales. También veo ahí un plastidecor blanco. Siempre se quedaban los últimos porque preferías jugar a otros juegos antes que a esas imitaciones baratas».

Pero, ¿cómo hacer humor a través de esos segundones en los que nos vemos reflejados? Juako Malavirgen lo tiene claro: «Por fortuna el público de comedia son gente que sabe hacer autocrítica. Muchas veces lo más divertido es darnos cuenta de las tonterías que hacemos en el día a día. Creo que si eres capaz de reírte de ello eso te hace invulnerable, te hace todopoderoso».