Tras una temporada de dura resistencia que han salvado «por los pelos» gracias a las ayudas públicas, los teatros aragoneses consideran que ya ha llegado el momento de recuperar al máximo los aforos. «Cuanto antes alcancemos ese 100% mejor. Y si continúa habiendo limitaciones en este sentido, lo lógico sería que las administraciones mantuvieran su apoyo, aunque sea en menor medida», subraya María López Insausti, presidenta de la asociación Aragón Escena (Ares), que aglutina a 16 empresas y cuatro espacios escénicos de la comunidad.

Los aforos en los espacios culturales como teatros y cines han ido incrementándose paulatinamente en los últimos meses en la comunidad. Hasta el pasado mes de diciembre se mantuvieron en el 25% y luego se elevaron al 50% hasta junio, cuando ya se alcanzó el actual 75%. Sin embargo, y tal y como indica la presidenta de Ares, ese porcentaje nunca se alcanza a efectos prácticos. «Como mucho llegamos al 65% porque tenemos que mantener las distancias entre grupos y eso obliga a dejar más butacas libres», señala López, que también es gerente del Teatro de las Esquinas. Así, desde el sector se considera que ya ha llegado el momento de alcanzar la normalidad plena en este apartado, siempre, eso sí, manteniendo las distancias entre grupos: «De esta forma podríamos llegar en realidad al 75% o al 80%».

Todo dependerá de la evolución de los contagios, pero lo cierto es que ya hay territorios moviendo ficha en esta materia. La Comunidad de Madrid ha comunicado este lunes que está estudiando aumentar los aforos al 100% a finales de septiembre, aunque prevé mantener la prohibición de consumir bebidas y comida en las salas de cine o la obligatoriedad de usar mascarillas.

Aunque en Aragón esta decisión está en manos del departamento de Sanidad en última instancia, el consejero de Cultura de la DGA, Felipe Faci, se muestra optimista en este sentido y confía en ir recuperando aforos poco a poco. «No puedo decir que esto se vaya a producir en dos meses, pero alcanzaremos ese escenario a lo largo de este curso», ha indicado este lunes Faci durante una entrevista concedida a este diario. El consejero ha insistido en que este debe ser un curso «de transición hacia la normalidad plena», más teniendo en cuenta que España es uno de los países «con más porcentaje de vacunados». «Hay que ser prudente pero también realista; si hay casos en los que se puede subir aforos se hará», ha señalado Faci, que ha apuntado que las reuniones con Sanidad son «constantes» para valorar esta medida. Con todo, el consejero ha recordado que en todo ello también influirá «la responsabilidad colectiva».

Respecto al tema de las ayudas, Faci ha destacado el esfuerzo que ha realizado su departamento en esta materia y ha subrayado que sigue en contacto con el sector para continuar brindándole su apoyo. «Es necesario e importante que las instituciones sigamos impulsando la oferta cultural, porque eso favorecerá el mantenimiento de la estructura cultural en Aragón», ha comentado Faci en la entrevista.

Este apoyo ha quedado constatado este verano con la programación propia que ha desarrollado el departamento autonómico. Buena muestra de ello es la cuarta edición del Festival Múver Música para noches de verano, cuyo cartel ha aumentado su programación respecto al año pasado. Desde el 4 hasta el 28 de agosto, los patios del Museo de Huesca, del de Zaragoza y la terraza del patio del IACC Pablo Serrano han acogido un total de 15 actuaciones de música y danza de música clásica, popular, lírica, de raíz y danza contemporánea.

«La oferta y la respuesta ciudadana ha crecido durante este verano; eso demuestra que los ciudadanos quieren y necesitan la cultura. Hay que verla como un derecho ciudadano y la obligación de un Gobierno es impulsar acciones culturales. Nosotros lo estamos haciendo a través de ayudas al sector pero también de la programación propia como el Múver o la gala de lírica y danza que se celebra en otoño e invierno», ha destacado Faci, que ha subrayado por otra parte que en la pasada legislatura el presupuesto del área de cultura y patrimonio «se multiplicó por tres».