La galería Cristina Marín celebró ayer la primera de sus tres jornadas de inauguración de la nueva exposición de Lorena Domingo, La quietud de lo efímero. La muestra, que permanecerá en la sala zaragozana hasta el próximo 5 de noviembre, mantiene la línea continuista de los últimos trabajos de la artista.

La quietud de lo efímero responde a una de las últimas lecturas de Domingo, La inquietud de la noche, de Marieke Lucas Rijneveld. «Es un juego con ese título, pero también con mi propia obra», confiesa Domingo, que asegura que todas su piezas siempre siguen «una serie, nunca se conciben como cuadros sueltos». Esta nueva exposición reflexiona sobre lo efímero como «ese momento fugaz en el que el artista debe darse cuenta de que ha terminado el cuadro». «Es muy importante captarlo, porque si fallas, puedes estropear todo el trabajo», reflexiona la pintora. De una forma más abstracta, La quietud de lo efímero también se relaciona con la temática de su obra, compuesta por «paisajes tipo retrato» que, en palabras de Domingo, «observan al espectador y pueden paralizarlo».

Domingo vuelve a exponer tras dos años de parón. Algunos de los cuadros que se pudieron ver en 2019 en el IAACC Pablo Serrano también están presentes en esta exposición. «Combino piezas nuevas con algunas ya conocidas para que se pueda ver la evolución de mi obra artística», explica Domingo. En Cristina Marín, la pintora zaragozana regresa con formatos de tamaño grande y mediano, «adaptados a las posibilidades que me ofrece la sala».

La nueva colección ha llenado de retos el trabajo de Domingo. «He bajado el ritmo de producción gracias al confinamiento, pero sigo teniendo la cabeza llena de ideas», comenta la zaragozana, que ha ido evolucionando gracias su autoexigencia, gracias a «usar colores a los que no estoy acostumbrada o probar con nuevas técnicas».

La quietud de lo efímero llega también con una novedad: por primera vez en su obra, Domingo muestra al público sus pruebas de artista: «Me apetece enseñar a lo que hay detrás del proceso de creación y, también, mostrar algunas de mis obras en papel».

La galería Cristina Marín acogerá la exposición de Domingo hasta noviembre y se puede visitar de martes a domingo, de 18.00 a 20.30 horas.