Levaban esperando la noticia desde hace semanas. Y más, desde que el fin de las restricciones de aforo dejó de ser una realidad hace ya unos días en la mayoría de comunidades españolas. De nuevo, la coincidencia de la semana del Pilar ha hecho que el regreso al nivel 1 de alerta por el covid llegue con cierto retraso a los espacios culturales de Aragón. También a los teatros. «Hemos sido los últimos de España, pero ahora eso ya da igual. Estamos felices y con muchas ganas de estar lo más cerca posible de la normalidad anterior a la pandemia», subraya María López Insausti, presidenta de la asociación Aragón Escena (Ares), que aglutina a 16 empresas y cuatro espacios escénicos de la comunidad.

La vuelta al foro completo ha animado a todos los teatros, si bien todos ellos mantenían una intensa programación pese a las restricciones. Seguirán vigentes eso sí las medidas de prevención, como el uso de la mascarilla y de gel hidroalcohólico, la desinfección de los espacios y las entradas y salidas del público ordenadas. «Vamos a seguir siendo muy escrupulosos con las medidas porque hemos sido y queremos seguir siendo unos espacios 100% seguros», señala López.

Ahora solo falta que el público responda, algo que viene haciendo en los últimos meses, tal y como celebran la propia presidenta de Ares y el director artístico del Teatro Arbolé, Iñaki Juárez: «Se nota que la gente tiene ganas de cultura. El arte en general ha sido un refugio en estos meses tan duros».

En este sentido, ambos se muestran optimistas y consideran que el público acudirá aún más a las salas tras el fin de las restricciones. «Hemos visto que limitar aforos provocaba miedo, porque conforme se han ido ampliando la gente ha venido más», indica López.

El nuevo escenario también permitirá que algunos espacios vuelvan a programar conciertos. Es el caso por ejemplo del Teatro de las Esquinas, cuya gerencia está en manos de la presidenta de Ares. «Habrá más música en directo, la hemos echado de menos», reconoce.

El resto de beneficiarios

La vuelta al aforo completo también beneficia a cines, auditorios, bibliotecas, museos, librerías, galerías y otros equipamientos culturales, un sector que ha recibido con los brazos abiertos el regreso a la fase 1 de alerta.

Así, las salas de cine aragonesas podrán volver a llenar todas sus butacas, después de que las palomitas regresaran ya a mediados de septiembre. Lamentablemente, la pandemia ha dejado una baja: los cines Yelmo de Plaza Imperial ya no volverán a proyectar películas tras 13 años de actividad.

Los museos, por su parte, podrán volver a retomar las visitas guiadas y las actividades en grupo, que dan un gran valor añadido a estos espacios. La vuelta a la fase 1 de alerta, además, también abre la puerta al regreso de los escolares a los museos.