Silencio. Se baila. Las luces del Teatro Principal se apagan y solo se oye el silencio del respeto hasta que rompe la música y aparecen en escena Claudia García y Javier Morera llenando el escenario con un número muy simbólico que enfrenta a un cazador y una ninfa. Es momento para que la danza se luzca y si no, que se lo digan a Anette Delgado y Dani Hernández que con Esmeralda desafían a la gravedad especialmente en sus momentos solistas. La danza es un lenguaje universal y de la precisión del baile clásico a lo rompedor de un baile contemporánea apenas hay un paso. Al fin y al cabo, las influencias no andan muy lejanas y de una manera rompedora Ginett Moncho y Ariel Martínez sorprenden a los espectadores con Dueto, una auténtica batalla en el escenario del que, como no podía ser de otra manera, ambos salen vencedores.

La gala Las dos orillas ha reunido en el Teatro Principal de Zaragoza en un espectáculo auspiciado por el Gobierno de Aragón dentro de su temporada de lírica y danza, a 12 de los grandes bailarines del mundo que hicieron un despliegue descomunal y brillante sobre unas tablas que saben muy bien lo que es la buena danza.

Sae Eun Park y Pablo Legasa salen al escenario recuperando la esencia más clásica con el color morado dominando la escena. Ambos estrenan la pieza Souvenez-voys de M’Aimer un Peu (pas de deux), un canto a la esperanza y, ante todo, a la belleza visual, que vuelve a impregnar a los espectadores de ese estado de espiritualidad que solo rompen los aplausos cuando acaba la pieza. No es el único estreno de la noche ya que Katherine Barkman y Giancarlo Pérez también prueban Un suspiro, una oda al baile en el que lo importante es sentir y disfrutar. Algo que, en realidad, consiguen casi con su sola presencia. Antes, también se habían estrenado en esta noche Martina Arduino y Marco Agostino con la pieza El corsario. Momento de que el telón descienda otra vez y el público pueda tomar aire en un breve descanso. Todo para dar paso a una segunda parte sin tregua en el que se representan las piezas El lago de los cisnes (segundo acto), Sylvia, Reverence, Coppélia, Aguas primaverales y Don Quijote. Ruido. Se aplaude.

El Atlántico es un océano que separa dos continentes, dos orillas que, en realidad, beben de un lenguaje común, la danza que en el Teatro Principal de Zaragoza ha bebido de las dos orillas durante las casi dos horas en las que se ha prolongado una gala que ha brillado con fuerza y que ha conseguido prácticamente llenar la sala. La temporada de lírica y danza del Gobierno de Aragón proseguirá este mismo sábado con El maestro de canto con la Orquesta Reino de Aragón, Carlos Chausson, Marina Monzó, Jorge Franco, Isaac Galán y Alberto Frías .