Desde 1213 hasta 1840 el Castillo Palacio de Calatorao perteneció al Cabildo del Pilar de Zaragoza. Conocido como el Castillo de los Priores o el de Doña Urraca, los pobladores de Calatorao durante todo este tiempo consideraron que había sido morada de la esposa del Rey Alfonso I el Batallador que había reconquistado las tierras del Jalón para el mundo cristiano. Las investigaciones de Isidro Villa miembro entonces de la Asociación Iniciativa Cultural Barbacana, consiguieron localizar el documento que aclaraba ese histórico error. El 5 se septiembre 1213 Pedro II de Aragón hace donación integra y perpetua a Fortún de Ontiñena Prior de Santa María la Mayor, y a su Cabildo, del Castillo y Villa de Calatorao. Quedando constancia de que por esta donación el monarca había recibido de Doña Urraca de Buñol y su hija Berenguela, 6000 maravedís. La tal Urraca resultó ser una viuda que no tenía ninguna relación con Urraca de Castilla.

Estos datos y otros muchos que aparecen en El Castillo Palacio de Calatorao han marcado la historia del lugar que se hace presente en su nombre, su escudo, su fe, su estructura urbana, sus economías y sus gentes. La publicación se convierte en un documento de 315 páginas, que recoge las obras y transformaciones que sufrió a lo largo de los años, realizadas por prestigiosos maestros de obras como Çalema Xama, protagonistas muy calificados en cada una de sus épocas y que jugaron papeles principales en la historia de Aragón, tales como Alonso de Aragón, hijo natural de Fernando El Católico que fue arzobispo de Zaragoza, o el poeta Pedro Marcuello, escudero y criado del Justicia de Aragón.

En los últimos capítulos, el autor recoge la historia más reciente desde el siglo XX hasta nuestros días, el acceso a la propiedad de Genaro Poza Ibáñez, la visita que este recibió de Ramón J. Sender a su vuelta del exilio mejicano o la adquisición del castillo por el ayuntamiento a finales del siglo pasado.