Ellas estaban allí es el título de la nueva exposición que acoge la sala Juana Francés de la Casa de la Mujer con motivo de su día internacional, una muestra que mira hacia el pasado para rescatar del fondo patrimonial del ayuntamiento la obra de mujeres artistas de los años 50 y 60.

Aunque entonces no tuvieron la visibilidad que merecían pese a sus méritos profesionales, sus pinturas y esculturas forman parte de la historia reciente del arte en Zaragoza. La concejal de Mujer, Igualdad y Juventud del Ayuntamiento de Zaragoza, María Antoñanzas, junto a la comisaria de la exposición, Desirée Orús, han presentado la exposición, junto a algunas de las autoras de las obras.

Así, Julia Dorado, Pilar Moré, Maite Ubide, Cristina Remacha y Carmen Salarrullana han podido contemplar sus obras expuestas en una sala que también lleva nombre de mujer, junto a las de otras compañeras del momento que ya no están, y que estuvieron representadas por sus familiares. En total, son 19 obras, en su mayoría pinturas aunque también hay escultura, forja o grabado, que plasman la vida que les rodeaba mediante retratos, paisajes o figuras sin olvidar su incursión en la abstracción.

«Con un magnífico tratamiento del color, se alejan de planteamientos clasicistas o académicos, buscando el ritmo de la pincelada y acercándose en muchas ocasiones al estilo expresionista», ha indicado la comisaria Desirée Orús durante la puesta de largo de esta exposición.

 En este momento histórico fue fundamental la actividad promovida por las instituciones locales destacando la labor llevada a cabo por el Ayuntamiento de Zaragoza que realizó una política de promoción de las artes con la convocatoria anual del Salón de Artistas Aragoneses, los concursos de pintura para las Fiestas del Pilar y Navidad o el apoyo a jóvenes promesas mediante becas y bolsas de viajes para la ampliación de los estudios artísticos.

Comienzos de los años 40

A comienzos de los años 40, se crearon salones de artistas que se celebraban en la Lonja durante las Fiestas del Pilar y en los años 60 tuvo lugar la I Bienal de Pintura y Escultura del Ayuntamiento de Zaragoza, un concurso nacional al que se presentaron un total de 247 artistas en el que Pilar Moré fue reconocida por su obra Paisaje aragonés.

Algunas obras premiadas en estos certámenes pasaban después a formar parte del fondo patrimonial del Ayuntamiento, y una selección de estas son las que ahora se exponen en la sala Juana Francés. El catálogo de la exposición incluye también la biografía de estas mujeres correspondiente a este periodo, y se analiza su formación, primero en Academias privadas, después en la Escuela de Artes de Zaragoza y más adelante en las Superiores de Bellas Artes, es decir la misma que la de sus compañeros. Sin embargo, el jurado, compuesto en su mayoría por hombres, se decantaba por premiar las obras de hombres antes que los trabajos de ellas. Pero como queda reflejado en los documentos y en las fotografías de la época, ellas estaban allí y esta muestra viene a rescatar todos esos trabajos de calidad.