Carles Sans, uno de los tres miembros de los míticos Tricicle, aterriza en el Teatro Principal de Zaragoza con su espectáculo ¡Por fin solo!, un título que lo dice todo. Tras cuatro décadas de actuaciones, el trío de mimos decidió darse un respiro, momento que aprovechó Sans para lanzar un proyecto en solitario.

La comedia, codirigida por José Corbacho, ha sido presentada este miércoles en el mismo lugar donde se escenificará en el próximo puente de San Jorge. En ella han estado presentes, además del propio Sans, José María Turmo, gerente del Patronato de Artes Escénicas y de la Imagen de Zaragoza, y Rafael Sánchez Rubio, productor de la compañía Zaragoza Comedy. Turmo ha definido la nueva aventura del cómico como una evolución: "Ha pasado de ser un tercio de Tricicle, a ser el 100% de Carles Sans". Una obra que ha sido un éxito en el Teatro Borrás en Barcelona, donde se desarrolló en catalán, y que espera siga siéndolo en la capital aragonesa. Sánchez Rubio, por su parte, ha destacado que hablar de Carles Sans es "hablar de historia del teatro".

Zaragoza es una plaza especial para Tricicle y, por extensión, para Sans, ya que fue el lugar donde se produjo su debut profesional en España. Una relación que se extendió por varios años, y que permite al barcelonés conocer de primera mano lo que va a encontrarse en sus distintas actuaciones. Sans no ha dudado en definir el Principal como "un teatro maravilloso, con un público magnífico".

Carles Sans, durante su espectáculo '¡Por fin solo!'

Un espectáculo distinto a Tricicle

Amén de la diferencia estructural que supone actuar en solitario tras toda una vida en grupo, la principal característica del monólogo salta a la vista nada más empezar la función: Carles Sans, el mimo, habla. Con todo, el cómico catalán se aleja de las etiquetas convencionales: "Técnicamente es un monólogo, pero no es el monólogo entendido por el stand up comedy". "La propia puesta en escena es muy teatral por todo lo que le acompaña", ha afirmado Sans en el acto. Una teatralización necesaria, en términos del badalonés, e inevitable debido a su extensa trayectoria sobre las tablas. El motivo de esta evolución es, como cabe imaginarse, el riesgo de estancarse en los mismos conceptos. En cualquier caso, el monólogo está estrechamente ligado a la gestualidad, algo lógico teniendo en cuenta los antecedentes. "Tras 40 años sin hablar, seguir haciéndolo hubiese sido un fracaso", ha sentenciado Sans.

En lo que respecta al contenido de la función, más allá del habla y la gestualidad, el actor ha adelantado que se trata de una serie de "historias reales", con algunas anécdotas que pueden llegar a parecer "inverosímiles del todo". Sans ha hecho referencia al escritor Josep Plá para justificarlo, el cual decía que, de la historia del ser humano, lo que más nos interesa es la anécdota. "La anécdota contiene la esencia de muchas cosas", ha concluido. Pese al "vértigo" que supuso para él enfrentarse solo por primera vez al escenario, el cómico espera poder repetir los llenos de Barcelona.

Las actuaciones se producirán, de forma ininterrumpida, entre el 21 y el 24 de abril, con horario de las 20.00 horas por tónica habitual, a excepción del último día, en el que será a las 19.00 horas. El espectáculo, de hora y media aproximada de duración, está recomendado para público mayor de 16 años, con precios que van desde los 5 a los 25 euros.