El Periódico de Aragón

El Periódico de Aragón

LITERATURA

Crítica de 'No creo que vuelva': Cuando menos te lo esperas

La ironía y las situaciones un tanto estrambóticas creadas por Pedro J. Bosch engullen totalmente a la tristeza a lo largo de toda la novela

El escritor y oculista Pedro Bosch.

Soy testigo diario en mi trabajo de los muchos clientes que buscan historias de humor, y a veces resulta complicado recomendar sabiendo ajustarse a lo que nos divierte a cada uno. Y en estas estoy cuando de repente emerge como protagonista un señor ya mayor y viudo que gusta de recalcar su profesión de protésico dental y al que le diagnostican una enfermedad incurable, detonante que le lleva a hacer balance de momentos concretos de su vida. Son episodios que le permiten mostrarse auténtico y vehemente y en los que no tiene problema en empezar pidiéndole cuentas al mismísimo Dios, presente en su infancia y sin embargo ausente ahora que lo busca con ansia para exigirle respuestas, lo que lejos de provocar desconcierto construye disparatados pensamientos y un debate consigo mismo que resulta realmente gracioso.

He aquí la tónica general de esta obra. Porque la ironía y las situaciones un tanto estrambóticas engullen totalmente a la tristeza. Cada pequeña historia narrada revisa y recoloca los momentos cruciales que merecen ser repasados y a aquellos que los han protagonizado. Así conocemos las andanzas del padre, que aparecía y desaparecía como por arte de magia hasta que un día le falló el truco y no volvió, y al que buscó años más tarde para ajustar cuentas consigo mismo y con sus circunstancias. Es este un personaje que no tiene desperdicio, en especial cuando se destapa su aventura amorosa con una exmonja, episodio que está contado con frescura y con un ritmo trepidante que invita a la carcajada, sintiéndose el lector como si lo estuviera viendo por el agujero de la cerradura y se le quedara grabada la imagen en la retina.

Se añaden igualmente asuntos turbios que forman parte de este cúmulo de despropósitos del padre y que tienden a perpetuar la capacidad de sorpresa de una historia tan singular que obliga a mantener a cada momento la sonrisa y a olvidar el trance que desencadena la trama. Y tras otros tantos trapicheos venidos de diferentes direcciones, los acontecimientos dan un giro cuando entra en escena una carpeta azul llena de papeles en los que dejó redactados unos apasionados apuntes su amada Etelvina, la que fue su esposa y la que le entregó su amor verdadero. Su presencia, desde la ausencia, es crucial porque está en las idas y venidas de este hombre que sin sentirse el rey de la fiesta se ha sabido seductor cuando la situación lo ha requerido, y que incluso no ha dudado en salvar a alguna damisela en peligro y lograr que el recuerdo permanezca. Queda preguntarse si dicho diario es o no es ficción, y es algo que habrá que averiguar mientras se acelera su desasosiego hacia un final que intuye próximo.

El secreto de este libro, 'No creo que vuelva', publicado por Mira Editores estriba en cómo el autor Pedro Bosch recompone una vida a base de retazos que parodian hechos realmente terribles porque trastocan lo que sería una existencia serena y apacible. Y una y otra vez el humor triunfa y se permite expresarse con desenfado. Insistirá en conocer mejor a quienes le rodean, lejanos compañeros del colegio cuya existencia ha cambiado por completo, lo que le obliga a él a aprender también a mirar con otros ojos. Se plasman los deseos contenidos, que se acaban convirtiendo en anécdotas o búsqueda del ideal en una esposa que buscaba evadirse de la rutina, bien a través de decisiones reales, bien a través de tramas imaginarias.

Es una novela muy bien escrita, con diálogos ágiles y reflexiones ácidas que terminan imponiéndose porque en una recta final no caben demasiados miramientos; una novela que por encima de todo invita a reírse de las circunstancias que siempre se atreven con una vuelta de tuerca más; una novela de personajes, pues cada uno de ellos contribuye a perfilar el retrato del protagonista y a hacerle sentir víctima de sus intrigas; una novela que se lee con fluidez, encadenando los capítulos y buscando en el enredo la manera de salir a flote; una novela rápida que busca llegar a las palabras definitivas, las que definen lo vivido y lo no vivido, y a las que se aferra para que, pase lo que pase cuando pase, se le hayan quitado las ganas de volver, como el autor, narrador o personaje avisa desde el propio título, que no sé muy bien si suena a advertencia o a desencanto. Sea por la razón que sea, sus historias con nosotros se quedan

Compartir el artículo

stats