La 50 edición del Festival Internacional de Cine de Huesca, celebrada entre el 10 y el 18 de junio, se cierra con un refuerzo de su capacidad vertebradora y logrando atraer al público a las salas. Más de 8.000 asistentes han disfrutado de 50 actos y 100 proyecciones donde se han conseguido volver a llenar las salas, como en la gala inaugural, y superar el centenar de personas en numerosas sesiones a concurso; una programación donde las colaboraciones con actores sociales y culturales han sido una de las señas de identidad. Las "bodas de oro" del certamen altoaragonés han traspasado fronteras, con su propuesta online ha impactado en más de 20.000 espectadores de países de Europa, América y Asia.
En el ámbito mediático, alguno de sus premios homenajes, como los entregados a Diego Luna -Premio Ciudad de Huesca Carlos Saura- o Terry Gilliam -Premio Luis Buñuel-, han sido noticia destacada en importantes periódicos, radios, televisiones y portales web de todo Iberoamérica. "El Festival aporta una imagen de marca incalculable para la ciudad a nivel nacional e internacional, eso sumado al respaldo social y tener de nuevo a los cortometrajistas en Huesca es el acicate perfecto para mirar al futuro con ambición y optimismo" ha afirmado el director de la cita oscense Rubén Moreno, que celebrará su próxima edición del 9 al 17 de junio de 2023.
La programación ha estado marcada por los 73 cortometrajes a concurso de 25 países, varios estrenos de largometrajes e importantes nombres a nivel internacional como los premios homenaje para Diego Luna, Terry Gilliam o el Instituto Cervantes; una combinación de datos e hitos que ha generado impactos en más de 80 países de todo el mundo, lo que supone una importante repercusión económica directa e indirecta tanto para la ciudad como Aragón.
La cita suma más de 8.000 personas en sus diversos actos programados a lo largo de esta edición. Una cifra que supone un notable incremento de más de un 50 por ciento con respecto al pasado año y que reafirma el interés y respaldo social del evento en un momento donde los efectos sociales de la pandemia y la amplia demanda de propuestas audiovisuales en plataformas de 'streaming' están generando una difícil situación para las salas de cine.
Presencialidad y online
Destaca especialmente el lleno, sin restricciones, en la gala de inauguración del 10 de junio, así como el número de personas asistentes a las sesiones de cortometrajes a concurso, que vuelven a registrar asistencias "pre-Covid" con proyecciones donde se supera ampliamente el centenar de personas.
Respecto a la parte online, se han sobrepasado los 20.000 espectadores. Una cifra que desagregada por territorios revela que tras España, se sitúan México con cerca de 400 streamings, mientras que Argentina, Brasil y Estados Unidos superan el medio centenar. Otros países donde también ha llegado la propuesta digital son India, Australia, Kazajstán o Guatemala. La repercusión mediática revela un año más la importancia del festival a ambos lados del Atlántico. Ha sido referente cultural para algunas de las principales cabeceras tanto en España como en Iberoamérica, con cerca del millar de noticias directas.
Dos de los nombres propios de la edición, el actor y director mexicano Diego Luna y el cineasta nominado al Oscar Terry Gilliam han generado un fuerte impacto en cabeceras, televisiones, radios y webs de México, Argentina, Colombia, Ecuador, Paraguay o Chile.
El crecimiento en redes sociales también es notable, el festival sobrepasa los 11.400 usuarios en todos los perfiles oficiales, incrementando así su alcance social en más de 1.300 seguidores.
El festival como elemento vertebrador
Esta edición, desarrollada del 10 al 18 de junio, ha logrado ampliar aun en mayor medida la capacidad vertebradora del certamen a nivel social e institucional. Durante los 9 días se han realizado actividades de marcado carácter social como 'Mayores al Festival' que ha ampliado el número de residencias donde ha proyectado su sesión especial de cortos, igualmente el sector educativo ha consolidado su propuesta con dos talleres -Programa 'Cine Base' y 'Niños al festival'- destinados a docentes de secundaria y alumnos de primaria.
Con el apoyo del Instituto Aragonés de la Mujer se ha desarrollado una programación donde el cine en femenino ha tenido cabida y protagonismo de forma transversal. Nombres como Emma Cohen, Nely Reguera -directora de 'La voluntaria', película de inauguración-, Helena de Llanos o María Guerra han reivindicado el talento y capacidad de las mujeres dentro de esta industria. Una vertiente que tiene su máximo exponente el jueves 16 de junio en la denominada 'Jornada violeta' donde gran parte de las propuestas se asentaban sobre directoras, actrices y guionistas.
Por otro lado, se ha seguido trabajando en la inclusión de la mano con CADIS Huesca -Coordinadora de Asociaciones de Personas con Discapacidad de la provincia de Huesca- con proyecciones especiales como la presentación de 'Valentina', la realización de actividades como el programa radiofónico Bandidos de la Hoya o la interpretación en lenguaje de signos de todas las galas celebradas en el Teatro Olimpia, entre otros ejemplos.
Junto a estas colaboraciones, numerosas instituciones y asociaciones se han sumado a la propuesta, consolidando al festival como un punto de encuentro entre actores sociales y culturales.
Reinversión económica en la ciudad y el territorio
Desde la organización, una de las bases estratégicas es la reinversión económica en el territorio y por ello la mayor parte del presupuesto se queda en Aragón, con prioridad a los proveedores y profesionales de la provincia de Huesca que representan el 95 por ciento del total.
Una sólida base fundamentada en el talento, capacidad y profesionalidad local que sirva de escaparate y altavoz en busca del fomento de las inversiones que puedan venir ligadas a invitados o empresas que durante los días del certamen pongan su mirada en la capital altoaragonesa.
La 51 edición, del 9 al 17 de junio de 2023
El Festival Internacional de Cine de Huesca anuncia ya las fechas de su próxima edición, la número 51 que tendrá lugar en la capital altoaragonesa del 9 al 17 de junio de 2023. Un anuncio clave para industria y cortometrajistas que marcan así en su agenda los plazos para poder aspirar a la selección en esta importante cita cinematográfica.
Superando el medio siglo de historia, con más de 24.000 euros en premios y el aval de los Premios Oscar y los Goya, "Huesca es un punto de referencia para el séptimo arte y la organización arranca ya con la preparación de una nueva programación donde el cortometraje y sus cineastas serán los grandes protagonistas", han añadido las citadas fuentes.
El Festival Internacional de Cine de Huesca cuenta como patrocinadores principales con Ministerio de Cultura y Deporte, Gobierno de Aragón, Diputación Provincial de Huesca Ayuntamiento de Huesca y Fundación Anselmo Pie; con los patrocinios de Alumbra, Podoactiva, Obra Social "la Caixa", EMBOU, TUHUESCA y el Instituto Aragonés de la Mujer; y el apoyo de Acción Cultural Española (AC/E) a través de su Programa para la Internacionalización de la Cultura Española (PICE).
