LLENO EN EL AUDITORIO

El Concierto de Año Nuevo de Zaragoza inunda la sala Mozart de sabor vienés

La Sinfónica Ciudad de Zaragoza ha estado dirigida por Laura Pérez Soria

Laura Pérez Soria ha dirigido la Sinfónica Ciudad de Zaragoza esta tarde.

Laura Pérez Soria ha dirigido la Sinfónica Ciudad de Zaragoza esta tarde. / ANDREEA VORNICU

D. M. B.

Zaragoza no es Viena ni tiene la tradición del Concierto de Año Nuevo tan arraigada pero tiene a la Orquesta Sinfónica Ciudad de Zaragoza que hace una década se lanzó al reto de crear un Concierto de Año Nuevo para la ciudad en el Auditorio de Zaragoza y que, diez años después, ha vuelto a meter 1.992 espectadores en el espacio, es decir, lo ha llenado.

Era su décimo aniversario y, por eso, la orquesta decidió, por un lado, contar con estrellas aragonesas que están triunfando por el mundo como la directora Laura Pérez Soria (con carrera internacional desde su residencia en Viena) y el tenor Eduardo Aladrén (residente en Alemania) para poner el broche de oro a un concierto que, además, ha contado con el Estudio de danza María de Ávila en tres de las piezas que se han interpretado y con los coros vocales Exeia y el juvenil del IES Reyes Católicos, ambos de Ejea de los Caballeros.

El Concierto de Año Nuevo ha contado también con el Estudio de danza María de Ávila.

El Concierto de Año Nuevo ha contado también con el Estudio de danza María de Ávila. / ANDREEA VORNICU

Medio centenar de músicos

En total, alrededor de 50 músicos que esta tarde han interpretado un programa (desvelado hoy mismo antes del concierto para preservar la ilusión de las sorpresas) que incluía piezas como la obertura de 'El barón gitano', de Strauss Jr, el 'Vals de los copos de nieve del Cascanueces', de Chaikovski; 'Feuerfest!', de Josef Strauss, así como varias polkas; y fragmentos de las óperas de 'Macbeth' ('O figli, O figli miei! Ah, la paterna mano'), 'Tosca' ('E lucevan le stelle') y 'La africana' ('O Paradis sorti de l’onde') cantados por el tenor Eduardo Aladrén.

Por supuesto, a este repertorio ha habido que añadir sorpresas que nunca aparecen en el programa de conciertos como este pero que todo el mundo saben que van a estar, cómo no, 'El Danubio azu'l, y la 'Marcha Radetzky'. Ha sido el broche final a un concierto que una década después sigue creciendo y que se ha instaurado como una cita obligada para los zaragozanos en estas fechas navideñas.