GRACIAS A UN PREMIO DE LA ONCE

Rocío López: "La jota es mi medio de escape para poder estar mejor"

La jotera, con discapacidad visual, lanza 'De Aragón llegué a Navarra'

La aragonesa Rocío López ha publicado su primer disco gracias a una iniciativa cultural de la ONCE

La aragonesa Rocío López ha publicado su primer disco gracias a una iniciativa cultural de la ONCE / Servicio Especial

Álvaro Jordán

Álvaro Jordán

La joven jotera Rocío López Laborda, de 20 años, ha lanzado su disco 'De Aragón llegué a Navarra', el cual presentará el próximo 23 de abril en Tauste, su localidad natal. El disco lleva 500 unidades vendidas y se trata de uno de los premios nacidos de la propuesta de iniciativa cultural de la ONCE a través de su Concurso Prometeo 2022. El evento premia la creatividad de propuestas a las personas con discapacidades visuales en diferentes modalidades: literaria, musical y audiovisual.

López, lleva el folclore y la jota en la sangre, como siempre le gusta decir. Y es que esa vocación proviene de sus padres y abuelos, puesto que nació en el seno de una familia que valora mucho las tradiciones: sus abuelos y madre son aficionados al canto jotero y su padre toca la guitarra. «Comencé a bailar jota a los dos años y medio, a los cuatro ya cantaba y a los cinco realicé mis primeras andaduras por los escenarios», comenta la jotera mientras recuerda cariñosamente la jota 'En Zaragoza un cañón', con la que le gustaba «fastidiar» a su madre por su desagrado a esa canción en particular.

'De Aragón llegué a Navarra' es la historia de la infancia de López, de cómo «sus montes me enseñaron la jota brava. Tauste colinda con las Bardenas Reales de Navarra, un enclave privilegiado, por lo que mi familia ha crecido apegada a la jota navarra. De ahí el título del disco». Desde pequeña, ha colaborado en varios concursos en diferentes categorías y ha obtenido diversos premios.

Fue a los 16 años cuando la jotera acabaría perdiendo la visión por una hipertensión intracraneal, un gran golpe que fue amortiguado por quienes describe como su pilar fundamental: su familia, sus amigos y sus profesores. «Son ellos quienes me han apoyado en todo momento y quienes me han animado a lanzarme con todo. Desde que perdí la vista, me refugio en la jota. Es mi medio de escape para poder estar mejor. Era primordial para mí», confiesa la jotera.

La joven compagina su trayectoria musical junto a sus estudios de Magisterio, los cuales no dejaría por nada en el mundo: «He podido encontrar un equilibrio entre mis estudios y la jota, pero los estudios son mi prioridad. Me encantaría especializarme en Educación Musical, ya que la música en la docencia es un factor fundamental. Con ella, puedes motivar a los alumnos y hacerles ver el temario de otra manera».

Asimismo, López explica que el disco no es su único proyecto musical actualmente ya que se está formando en más registros. Actualmente, figura en el Coro Cantatutti, que vela por la inclusión y fomenta una ayuda continua, colaborando en propuestas como mochilas multisensoriales. La jotera también imparte en conjunto un taller de jota en la ONCE para 22 alumnos.

La labor y enseñanza de la ONCE

«Gracias a la ONCE he aprendido a ser autónoma. Aunque sigo sin admitir lo que me pasa, he podido darme cuenta de que mi situación no es una discapacidad, sino capacidades diferentes al resto. Me he centrado en mis estudios para poder ser independiente, con el apoyo de los míos. Por ejemplo, vivo sola en un piso, soy capaz de ir a todas partes sin ayuda y hago mis tareas de la casa. Eso ha sido trabajo de la ONCE, que realiza una gran labor de enseñarnos», confiesa la jotera orgullosa.

Por el momento, López pretende seguir tanto con la jota como con su carrera universitaria. «Siempre me ha gustado enseñar, por lo que Magisterio es una vocación para mí, aunque no descarto estudiar Psicología en un futuro también. A la gente que sufra la misma situación que yo, quiero que sepan que no se trata de poder hacer algo, sino de querer hacerlo. Es una cuestión de actitud, te cueste más o menos. Ese ha sido mi lema, y lo seguiré hasta el final», concluye.