La Escuela de Circo Social de Zaragoza celebra esta semana su proyecto de convivencia 'Cirque à Dos' en Graus, Benabarre y Campo. Se trata de un encuentro de 26 jóvenes, de entre 13 y 17 años, provenientes de Zaragoza y de Toulouse, unidos por la ilusión y el objetivo de compartir el arte del circo en diferentes pueblos de Aragón para favorecer un lugar de convivencia, de relación cotidiana, respeto y diálogo, teniendo en cuenta criterios medioambientales en sus propuestas para aprovechar los recursos del entorno.

Los jóvenes de Zaragoza y Toulouse ya están en Graus donde estos días realizan entrenamientos y talleres abiertos a la población con el objetivo de crear vínculos con el territorio. Este jueves, 6 de julio, los alumnos de la Escuela de Circo Social de Zaragoza actuarán en el municipio de Campo y el viernes, 7 de julio, los del Centro Municipal de las Artes del Circo El Lido lo harán en Benabarre. Por último, y dentro de la programación del festival NOCTE de Graus, el 8 de julio, a las 19:00 horas, los jóvenes interpretarán el espectáculo 'Hoy empieza todo' y a las 20:30 horas los de Le Lido con la obra 'En transición'.

La función 'Hoy empieza todo' trata sobre la búsqueda hacia lo que no tenemos, lo novedoso y que nos tienta constantemente. Pero cuando estamos con nuestro círculo de confianza, no nos hace falta nada más. A través del trapecio, las telas, el aro, los malabares y el mástil, los artistas encontrarán su propio lenguaje para transitar a través de este proceso. Por su parte, 'En transición' es un espectáculo fantástico e hilarante. El gesto habla y la palabra gesticula en esta fiesta circense en la que los intérpretes compartirán una pequeña parte de ellos eligiendo reír, llorar, ponerse nerviosos e incluso amarse.

La Escuela de Circo Social

Desde el 2011, la Escuela de Circo Social es una asociación sin ánimo de lucro que promueve el circo como herramienta de cooperación entre la juventud de los diferentes barrios de la ciudad de Zaragoza, apostando por un vínculo territorial. Esta propuesta educativa, comunitaria y artística parte de una cultura activa con la firme voluntad de transformación social del entorno y de su comunidad a través de la enseñanza práctica de las diversas disciplinas circenses (malabares, equilibrios, aéreos, acrobacia, clown, etc.), dando importancia al desarrollo integral y a la autonomía de la persona.