Entrevista

Edu Soto: "Estaba un poco perdido pero este oficio me salvó de la desidia"

Protagoniza ‘Más vale solo que ciento volando’, este viernes y sábado en el Auditorium de Palma, un monólogo "diferente" que exige "sintonía con el espectador" para que el resultado final "no se vea dañado"

Edu Soto, actor, humorista, cantante

Edu Soto, actor, humorista, cantante

Gabi Rodas

Ignoro si usted es un apasionado del deporte, pero tengo que preguntarle por Nadal

Nos guste más o menos el tenis, todos hemos seguido la carrera de Nadal, la cual me parece una proeza. Si se retira será porque realmente no da para más. El tipo se merece descansar. Le doy mi enhorabuena por su trayectoria y valentía.

¿Siempre ha necesitado interactuar con el público?

Sí, y en este espectáculo es algo básico, esencial, ya que hay varios momentos en que algunos espectadores se suben al escenario para participar. Necesito que haya buena sintonía para que el espectáculo no se vea dañado. Esa relación con el público hay que currársela, para que los espectadores no estén cohibidos. Si el público está a gusto, la función sale bien.

¿Qué hace diferente a sus monólogos?

No es el monólogo típico de stand up comedy donde hay un cómico que te está contando una historia. Yo me meto en la piel de varios personajes, hago coreografías, bailo, canto, hipnotizo a un espectador... Hago muchas cosas que no son simplemente .contar una historia.

¿Edu Soto está más cerca del humor blanco que de la provocación? 

No creo que mi humor sea blanco e inocuo, tiene personalidad y hay una intención detrás. Un amigo mío director de teatro que vino a verme me dijo: «A veces te pasas un poco». Pero no me pasó porque sí sino porque a veces surge. Mi humor no es blanco ni provocador, me dejo llevar, y hay días que estoy más punki y otros, menos.

¿Cuándo supo que su profesión sería la de humorista? 

Fue un poco por casualidad. Yo de pequeño imitaba a grandes referentes como Faemino y Cansado, Martes y Trece, Cruz y Raya... Y yo no sabía que eso era una profesión, hasta que un día lo descubrí y me quedé en ella.  

¿Es cierto que llegó a creer que era un fracasado y no servía para nada? 

Sí, sí, sí. No encontraba mi lugar, mi profesión, estaba un poco perdido, hasta que di con este oficio tan bonito y me salvé de la desidia.  

¿Sigue yendo a clases de música? 

Sí, ahora estoy yendo a clases de trompeta. Sergio Peris-Mencheta  me habló de una obra de teatro que me quería proponer y en la que yo debía de tocar este instrumento. "Empieza a darle a la trompeta", me dijo. De momento esa función no se ha hecho pero yo sigo dándole a la trompeta y formándome en su manejo.

No es el único instrumento que maneja. 

También un poquito la percusión, el ukelele y alguno más, pero ninguno súper bien. Tonteo con varios instrumentos, soy un músico frustrado. A mi edad, controlar muchísimo un instrumento... si no empiezas con 7 u 8 años es muy complicado. 

Con el que se defiende muy bien es con la voz. 

Ese sí lo he trabajado más tiempo. Estuve varios años en Barcelona recibiendo clases de canto. La voz es mi instrumento, sin duda, con el que me siento más cómodo y con el que realmente puedo llegar a volar. 

¿Sigue al frente de Delaroom o anda metido en otros proyectos musicales? 

Ahora estoy en otro proyecto que se llama Welcome Lemi. A raíz de la pandemia empecé a hacer música con mi mujer, que es violinista, y también con otros familiares, todos músicos. Tenemos un disco, que grabamos hace un par de años, con catorce músicos en directo. No ha tenido demasiada repercusión porque tampoco hemos hecho mucho hincapié en darlo a conocer. Ya veremos si algún día nos da por dedicarle más energía a este proyecto. 

¿Qué planes tiene para lo que queda de 2024? 

En dos semanas empiezo un programa de televisión pero no puedo decir nada más hasta que oficialmente lo presenten. Sí te diré que estoy preparando un nuevo proyecto que sería un poco la evolución de Más vale solo que ciento volando. Estoy muy contento porque es un texto que llevo un año y medio escribiendo. Si todo va bien un gran director de este país me dirigirá. Ahora mismo estamos cerrando toda la preproducción. Será un espectáculo más incisivo, fresco, con sentido del humor, e importante en cuanto a preparativos. 

En televisión le vimos recientemente en la serie Atasco (en Prime Video). 

Sí, una serie con la que aprendí que hace mucho frío en Madrid encima de una grúa. Coincidí con dos actrices maravillosas: María León, y Carmen Ruiz. 

¿Alguna vez se ha sentido atascado en su carrera profesional?

Constantemente hay que coger el sacacorchos y empezar a desatascar. Hay momentos en los que te ves en una nueva etapa, o en un renacer, y de repente te vuelves a atascar. Esta profesión es una lucha constante. 

¿Qué programa ve estos días en televisión?

Estoy entre El intermedio y La Revuelta

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