Las lágrimas de Leire Martínez en Zaragoza que anticipaban su adiós a La Oreja de Van Gogh

Para muchos, las lágrimas de Leire Martínez en el concierto de Zaragoza el lunes 7 de octubre se antojaron como el anticipo del adiós definitivo de la cantante a La Oreja de Van Gogh tras 17 años. Una semana después, las elucubraciones han tomado cuerpo. Es oficial: La Oreja se ha quedado sin voz... por ahora.

El anuncio ha llegado precisamente en plena polémica por el regreso de Amaia Montero al grupo. "Después de 17 años maravillosos repletos de música y emociones que jamás olvidaremos, queremos anunciar que las trayectorias profesionales de Leire y La Oreja de Van Gogh seguirán caminos separados", ha escrito la banda en Instagram.

Desde que la periodista Isabel Rábago anunciase, en Telemadrid, una posible reunificación, los rumores sobre su regreso no han hecho más que aumentar. Sin embargo, en una entrevista a Pablo Benegas por la publicación de Memoria, un libro sobre su juventud marcada por las amenazas de ETA al histórico socialista Txiki Benegas, el guitarrista respondió diversas cuestiones sobre la situación actual de la banda.

Preguntado sobre la posibilidad de realizar próximamente alguna colaboración con Amaia Montero, que dejó La Oreja en 2007 tras pasar 11 años en ella, aseguró: "La relación es buena, pero no tendría sentido. Tiene un punto demasiado comercial y nosotros no estamos ahí. Queremos seguir escribiendo canciones. Cada vez nos cuesta más, buscando las mejores palabras y melodías. Es nuestro principal motor". La charla tuvo lugar tres semanas antes de aparecer el runrún.

En imágenes | Lleno hasta la bandera en el concierto de La Oreja de Gogh en Espacio Zity

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Desde entonces, ningún miembro del grupo se manifestó al respecto hasta que, el pasado septiembre, Leire habló por primera vez de ello en 'Navarra Televisión': "No me gustan las faltas de respeto. Que se diga que Amaia vuelve al grupo no me importa, no me afecta para nada, lo que no me gusta es que se me ningunee. Yo es algo que ahora mismo no me planteo".

"Además, será el grupo el que tenga que decir si esto va a ser así o no. Lo que no me gusta es escuchar es: 'Ah, pues bien, qué maravilloso que vuelva'. ¿Y yo qué? Parece que a todo el mundo se le olvida que hay una cantante en el grupo, que llevo 16 años. Me resulta feo eso, parece que no importa nada", asegura, muy tajante.

"La decisión ha sido dura y difícil, pero llega después de mucho tiempo de reflexión y profundas conversaciones en las que no hemos conseguido acercar nuestras diferentes maneras de vivir el grupo. Termina una etapa fascinante que todos llevaremos en el corazón y que nos ha permitido disfrutar de la mejor profesión del mundo de una manera soñada", continúa el comunicado.