La selección aragonesa sub-18 vio cómo se le escapaba una valiosísima victoria en el minuto 93, en el tiempo añadido, en este caso maldito para un equipo que necesitaba los tres puntos de cara al futuro en el Campeonato de Selecciones Autonómicas. Frente a un rival en teoría superior, los jugadores aragoneses merecieron el triunfo y lo tuvieron en sus manos después de que Giménez marcara primero, en el minuto 63, al aprovechar un rechace.

EXCELENTE PLANIFICACION Carlos Casaús planificó de forma excelente el encuentro, sin dejar que los madrileños consiguieran maniobrar con comodidad. La disciplina de Aragón condujo el encuentro en su primera mitad al terreno del respeto mutuo, sin ocasiones claras y con escaso acercamiento a las áreas. La segunda mitad presentó a una selección aragonesa arrolladora que sumó cinco oportunidades, fruto de su gran juego y atrevimiento.

Giménez marcó, tuvo otra meridiana oportunidad --también Valero y Pérez Rubio-- y todo hacía prever que el triunfo tenía propietario. Sin embargo, Madrid, por obra de Molinero, lograría el empate, un premio excesivo.