La Real Sociedad no dio la impresión de haber superado la derrota de la jornada anterior y ayer dejó escapar, en Anoeta, una buena oportunidad para marcar distancias con sus perseguidores al no pasar del empate ante el Espanyol de Clemente en un partido que careció de brillo.

El encuentro fue trabado y con marcajes muy férreos. El líder acusó la precisión en los centros de De Pedro y la velocidad de Nihat, dos ausencias de peso en la Real ante la desaparición de Karpin en una novedosa posición como pivote en la que no llegó a cuajar el futbolista ruso.

La Real mejoró en la segunda mitad, a pesar de perder por lesión a Xabi Alonso, y en este periodo el equipo vasco creó ocasiones claras para batir a Toni, un remate de cabeza de Kovacevic que repelió el travesaño, un tiro de Khokhlov que besó el poste y un chut a bocajarro de Tayfun que golpeó en el portero españolista fueron sus principales argumentos ofensivos.

El equipo de Clemente, por contra, se mostró muy inofensivo, algo que tendría su reflejo en una jugada en la que Domoraud solo ante Westerveld entregó mansamente el balón al portero local en la única opción de gol de los catalanes.