A José María Aznar se le acumulan las protestas. Dos aficionados saltaron ayer al terreno de juego mostrando una pancarta en la que se podía leer "No a la guerra" contra Irak. El primer joven eligió el mejor momento. Apareció segundos antes de que sonara el himno español y fue rápidamente sujetado por un vigilante de seguridad que le invitó a abandonar el césped de estadio mallorquín. Al espontáneo, al menos, le quedó el consuelo de recibir una fuerte ovación del sector más joven de la grada. El segundo joven saltó al campo en el minuto 65 de partido, ataviado igualmente con una camiseta blanca.