No anda el Zaragoza, ni mucho menos, sobrado de centímetros, pero sí en cambio Osasuna. La estatura habla de clara ventaja navarra, 181 centímetros de media en el once titular por los 178 del equipo zaragocista, por no hablar de la comparación aérea entre los dos nueves , ese tanque uruguayo que responde al apodo del Chengue Morales frente al Guaje Villa, 196 centímetros contra 175. Sin embargo, El conjunto rojillo suma las mismas dianas de cabeza que los de Víctor Muñoz, cinco ambos, lo que deja claro que la altura no lo es todo a la hora de exhibir poderío aéreo, aunque, obviamente, ayuda mucho.

Valdo, Moha, Aloisi, Bakayoko y Morales, todos con un gol, completan la nómina de goleadores osasunistas de cabeza. Más corta es la del Zaragoza, ya que Villa ha marcado dos --uno más que el Chengue -- y Alvaro, Generelo y Delio Toledo completan esos cinco tantos. Sólo Mallorca y Racing de Santander, que han anotado cuatro, son peores en esta disciplina que los dos contendientes de esta tarde en La Romareda, mientras que el Valencia y el Valladolid son los equipos que mejor rentabilizan esta faceta aérea tan vital en el fútbol, con 16 dianas cada uno en esta Liga.

TRAGEDIA ZARAGOCISTA Es cierto que Osasuna gana en poderío aéreo en ataque con la entrada de Morales y si el díscolo Bakayoko --no convocado en esta ocasión tras su enfrentamiento con Aguirre hace una semana-- y Webó, que ocupará plaza de banquillo tras ser titular ante el Racing, no están en el césped, ya que estos dos futbolistas son mucho más veloces que el uruguayo, que encuentra un buen aliado en Aloisi (186 centímetros) para intentar dominar el juego por alto. Con ambos se las tendrán que ver Alvaro y Milito, con el regreso de Delio Toledo al lateral zurdo para echar una mano y con la inestimable ayuda de Soriano, del que Víctor tira en esta ocasión consciente de que en el espacio aéreo puede estar una de las claves del choque.

Sin embargo, la importancia que puede tener este duelo, sobre todo en las segundas jugadas que puedan favorecer a Valdo, Moha, Puñal o Muñoz, no se refleja en los números globales en ataque de Osasuna, lo que constituye un alivio para un Real Zaragoza enfermo en el dominio del aire, como lo demuestran los 17 goles que ha encajado en este campeonato --a los que hay que añadir dos más en Copa--, lo que le coloca en un liderato destacado en este aspecto tan negativo.

Osasuna, un bloque más que poderoso en defensa --con 33 goles en contra sólo le superan en contundencia atrás el Valencia (24) y el Deportivo (32)--, ha encontrado su talón de Aquiles particular en ataque, donde ha tenido problemas a lo largo de todo el curso. De hecho, la octava plaza que ocupa en la Liga no tiene parangón al mirar los registros anotadores, que sitúan al conjunto navarro como el segundo peor equipo de la Liga, empatado con el Albacete, ambos con 37 dianas, y sólo mejor que el Murcia (27). Por eso el mal aéreo de los rojillos es sólo un aspecto más de la debilidad ofensiva del conjunto que dirige el mexicano Javier Aguirre, aunque mal haría el Zaragoza de fiarse cuando enfrente tiene tantos centímetros de altura.