Gabriel Gañarul es uno de esos apasionados del fútbol que tiene que hacer memoria para recordar cuándo empezó en este mundillo. Desde hace ocho temporadas es presidente del Utebo y ha llevado al club a vivir una de sus etapas más brillantes.

Cuando le preguntamos cuánto tiempo lleva en el fútbol, lo primero que suena es una exclamación que le sale de muy adentro y vale más que cualquier respuesta. E, inmediatamente, contesta: "Desde que tengo uso de razón. Con doce años, ya estuve como utillero cuando el Utebo fue a jugar un Campeonato de España de aficionados.".

Con este antecedente, no es de extrañar que, cuando el equipo de sus amores, el Utebo, lo necesitaba, no se lo pensara: "Cogí al Utebo hace ocho años porque, si no, desaparecía", explica. Y en estos ochos años su currículo al frente del equipo zaragozano es brillante. Un título de Tercera, un segundo puesto y, el año pasado, aunque fueron quintos y estaban dispuestos para jugar los playoffs por el descenso del Zaragoza B, se llevaron un chasco: "Por una jugada de la Federación no jugamos los playoffs. Todos los equipos estaban convencidos de que el quinto los jugaba y, una hora antes del sorteo, nos notifican que puede jugar el Universidad", dice recordando con tristeza, pero sin atisbo de rencor.

Pero esta afición por el fútbol no es cosa exclusiva de Gabriel en la familia: "Tuve un hermano árbitro y otro está conmigo en la directiva.", comenta. De hecho, cuando fue jugador, tuvo que sufrir a ese hermano árbitro, y no es bueno el recuerdo, porque acabó camino de los vestuarios antes de tiempo. Según explica, quizás más por sorna que por justicia: "Sí, me expulsó porque le apeteció. Se quería quedar conmigo", lamenta. Y añade, ahora con algo de sorna por su parte: "Ya es agua pasada. Pero por aquí no viene mucho porque es socio del Zaragoza.", dice para zanjar el asunto.

En lo deportivo, nos comenta que las cosas van bien en todos los aspectos y, desde luego, han apostado fuerte con fichajes, como el goleador almuniense Morales, Imanol, Melendo, Roldán, Luis González y el meta Gascón. Pero, como curiosidad, también destaca el fichaje de un argentino, Facundo: " Su padre está aquí, vive en Pedrola. Lo estuvimos probando y gustó", aclara el máximo dirigente del Utebo. Con él, esperan superar a sus rivales en la lucha por el título, que él cree que saldrá entre Zaragoza B, Andorra, Sariñena y Teruel.