El CAI Aragón afronta su primer desplazamiento de la temporada con la confianza de haber amarrado los puntos del debut y con la intención de continuar sumando de dos en dos antes de que la campaña se le complique con la llegada de la competición europea y de los enfrentamientos con los grandes. El choque en Algeciras (19.30 horas) es una buena oportunidad para que las nuevas piezas de Kosovac continúen acoplándose, mejoren las sensaciones que ofreció el equipo en su estreno y la cuenta naranja de puntos siga aumentando.

La plantilla viajó hasta Algeciras en la madrugada del jueves al viernes y llegó a su destino al mediodía de ayer. Por la tarde completó la última sesión de entrenamiento con los catorce desplazados. Kosovac sólo dejó en Zaragoza al todavía renqueante Antonio Cartón y a Borja Fernández. Stian Vatne regresa a la que fue su casa la pasada campaña.

El Algeciras está menos tranquilo que el CAI. Sufrió un duro varapalo en Granollers hace siete días (35-26) y necesita una victoria que confirme su nuevo proyecto y que empiece a convertir su pabellón en un fortín, como pretende Pero Milosevic, el nuevo técnico del cuadro gaditano. Habrá duelo de serbios en los banquillos. La mayor preocupación de Milosevic es la recuperación del ruso Serguei Pogorelov, que arrastra una luxación interfalángica en el cuarto dedo de la mano izquierda, por un golpe recibido hace dos semanas en la final de la Copa de Andalucía. El resto de la plantilla está a disposición del técnico.