Para Cani el del domingo en El Madrigal será un partido especial, pero también para sus excompañeros en el Zaragoza, donde dejó grandes amigos en el vestuario, que también sentirán esa misma extrañeza al ver al mediapunta sobre el césped y con otra camiseta. "Se me hará muy raro tener que enfrentarme a él. Para mí fue mucho más que un compañero desde que subí al primer equipo, es uno de mis mejores amigos y me ayudó siempre. Es difícil verlo como un rival, pero son las cosas del fútbol y hay que aceptarlo", explicó Zapater, que no tiene dudas de que su amigo es uno de los futbolistas más peligrosos del Villarreal y menos aún de que triunfará en ese equipo pese a que fue suplente en la última jornada.

"A mí me extrañó mucho que no jugara. Conmigo desde luego lo haría siempre y creo que con cualquier entrenador también debería hacerlo", señaló Óscar, otro de los grandes amigos que dejó Cani en el vestuario. Como en el caso de Zapater, mantienen el contacto telefónico, pero esta semana no han podido hablar todavía. Aun así, seguro que lo harán antes de verse las caras en el campo y es más probable que se cruce alguna apuesta: "Tiene muchísima calidad como futbolista, pero como persona todavía es mejor. No se tenía que haber ido nunca del Zaragoza, es inexplicable que un jugador de su talento se marche", añadió el salmantino.

La relación de Cuartero con Cani también es muy especial. Al capitán, que no jugará el domingo por lesión, se le hará muy raro ver por la televisión a su amigo con otra camiseta y contra el Zaragoza. "Ojalá tenga mucha suerte en esta etapa en el Villarreal, aunque estoy convencido de que con la calidad que tiene no la necesita. Triunfará seguro".

CALIDAD Y VISIÓN DE JUEGO Qué duda cabe de que ese triunfo lo desea el capitán y toda la plantilla zaragocista para después del partido ante el conjunto aragonés, donde habrá una vigilancia especial para el futbolista nacido en Torrero. "Es un buen jugador, del que destaco sobre todo su visión de juego y su inteligencia. Ahora ha empezado otra vida, porque el fútbol tiene estas situaciones, y sólo nos queda desearle que sea muy feliz, pero no contra nosotros, que destaque allí a partir del domingo", sentenció Ewerthon.

Ponzio también tildó de anecdótica la suplencia del aragonés en el último partido de Liga del Villarreal en Riazor. "Ojalá juegue contra nosotros. Sabemos que es un gran futbolista que va a querer aportar a su equipo lo mejor, aunque trataremos que no lo haga. Pero es difícil porque tiene mucha calidad", aseveró el centrocampista argentino.

Cani explotó como futbolista de Primera la temporada pasada, con César guardando ya el marco zaragocista. El domingo, el portero lo tendrá enfrente, aunque eso no evitará un saludo más que efusivo antes y después del encuentro. "Él ahora viste la camiseta de otro equipo, pero cuando se la quita yo estoy seguro de que es zaragocista de corazón. Le tengo mucho respeto como excompañero y amigo, pero en en el campo sólo hay ganas de ganar por los dos lados".