Diarra, con un gol en el inicio del partido, dio al Real Madrid el triunfo ante el Real Betis en un partido en el que el equipo de Fabio Capello solo se mostró superior en los primeros cuarenta y cinco minutos, y que con ello mantuvo su racha positiva de las cinco últimas confrontaciones, con tres empates y dos victorias. Con esta victoria, y a la espera de los encuentros de hoy, el Madrid se coloca líder provisional de Primera División.
Bajo el mando de Diarra, un coloso en el centro del campo, donde cortó, distribuyó e incluso se permitió el lujo de marcar su primer gol con la camiseta del Madrid, el equipo de Capello controló a su antojo en el primer tiempo. Sí funcionó el dúo en la medular formado por Diarra y Emerson, lo que propició que la cobertura madrileña apenas pasara por apuros, y en donde destacó la seguridad y contundencia del sevillano Sergio Ramos.
Lo temprano del gol de Diarra, a los seis minutos, hizo que el Madrid jugara al ritmo que más le interesó, sin forzar demasiado y con intensidad a intermitencias, y además tuvo en la banda derecha a un Reyes que fue un estilete en la dubitativa defensa verdiblanca. Ante el mayor control del Madrid el Betis solo opuso acciones aisladas, la más peligrosa en un remate de Juanito, de cabeza, a los 36 minutos, tras saque de esquina, que Casillas neutralizó en dos tiempos en la línea de meta.
OPORTUNIDADES Pudo sentenciar el Real Madrid en los primeros minutos del segundo tiempo, en jugada coordinada de los de Capello, que no pudo culminar Van Niteslrooy, ante la salida de Doblas. También tuvo una oportunidad clarísima Cassano a los 52 minutos, pero el italiano se hizo un lío y permitió el despeje de la zaga local.
La salida de la cancha de Reyes y la posterior del italiano Cassano maniató los argumentos ofensivos del Madrid que pareció conformarse con la mínima ventaja en el marcador ante un Betis algo más ambicioso que ganó con la entrada de Capi y del alemán Odonkor --el primer alemán con la camiseta del Betis-- y el incansable trabajo del brasileño Sobis, el único peligro ante el marco de Casillas.
