Diez heridos, cinco de ellos agentes de las fuerzas del orden, y tres detenidos fue el resultado de los incidentes producidos durante el Lazio-Atalanta (1-0), de la cuarta jornada de la Serie A de Italia. Los problemas más graves tuvieron lugar antes del inicio del encuentro, cuando un grupo de seguidores del Atalanta bajaron de dos autobuses e intentaron agredir a aficionados laciales, a los que lanzaron también distintos objetos.